Llevar efectivo puede ayudar a afrontar gastos diarios, además de que permite limitar las compras compulsivas.
Las tarjetas de débito y crédito son un buen método de pago en ciertas situaciones, brindan comodidad, además de que permiten retirar dinero, pero sobre todo, se convierten en un método de fácil acceso a un registro de consumo.
Una tarjeta de crédito se distingue de una de débito es que permite el pago aplazado, la posibilidad de comprar ahora y pagar después, independientemente del dinero que haya en la cuenta; sin embargo, su mala utilización puede desembocar en grandes deudas.
Con las de débito el gasto se carga de inmediato, de forma que sin saldo no hay compra.
En necesidades específicas
El uso de las tarjetas de crédito en el mercado local ha aumentado en los últimos años, ya que existen muchos tipos y cada una va dirigida a un segmento específico o cubre una necesidad determinada.
Para César Tánchez, experto en finanzas personales, al momento de utilizar la tarjeta de crédito se debe analizar el tipo de compra que se realizará: lo saludable es no gastar más de lo que se puede pagar a fin de mes.
“Solo hay que hacer uso del pago mínimo cuando sea necesario y no incurrir en el abuso, porque de lo contrario, solo se amortizan los intereses generados, pero no se cancela la deuda”, explicó Tánchez.
Según el consultor, poseer una tarjeta de crédito genera beneficios oportunos según la necesidad del momento. Es una buena decisión, solo se debe asegurar la capacidad de pago y saber utilizarla.
Las tarjetas de crédito se pueden utilizar como medio de pago y línea de financiamiento.
Una de sus ventajas es que ofrecen seguridad al no tener que portar dinero en efectivo, ayudan a emergencias si no se dispone de efectivo, y también son útiles para reservaciones de hoteles y vehículos.
Expertos coinciden que antes de solicitar una tarjeta a una entidad financiera, lo importante es evaluar para qué se necesita.
A eso hay que agregar que es necesario tomar en cuenta que la tarjeta de crédito no es una extensión del salario, sino un medio de pago, y que es importante hacer uso adecuado del límite de crédito para que las cuotas no excedan la capacidad del usuario.
Sustituto del dinero en efectivo
En el sector financiero existen diferentes tipos de tarjetas, según la página de internet de Visa.
Tarjeta de crédito: el usuario puede disponer de dinero ya sea en efectivo o electrónico, sin tener fondos en la cuenta asociada.
Tarjeta de crédito empresarial: se utiliza para subsidiar cualquier gasto de la compañía, de manera flexible.
Tarjeta prepago o monedero: el cliente solo puede disponer del saldo exacto.
Tarjeta de fidelidad: la entregan los comercios a los usuarios y sirven de manera exclusiva para efectuar compras de artículos en los establecimientos que las han emitido y hasta el límite pactado.
Disminuyen la tentación
Disponer de efectivo puede ser una excelente manera de evitar el gasto excesivo, ya que el usuario puede elegir exactamente cuánto está dispuesto a gastar y en qué momento abstenerse.
Para algunas personas, llevar dinero en efectivo puede ser una tentación para hacer gastos no deseados, debido a su fácil acceso; por eso, el uso de la tarjeta de débito es una opción.
La página web www.consumer.es describe a la tarjeta de débito como un medio de pago ligado generalmente a una cuenta de ahorro o de cheques, con la ventaja de que el usuario no lleva efectivo y gasta solamente lo que posee en la cuenta, además de que no paga intereses.
Chendo Chavarría, gerente general de Visa para Guatemala, refirió que en el país se manejan más tarjetas de débito que de crédito, debido a que para el consumidor se constituye en una puerta de entrada al mundo financiero.
Agrega que en Guatemala existen dos tarjetas de débito por cada tarjeta de crédito.
“Las tarjetas de débito ofrecen una gestión de registros sencilla, que hace que las compras sean convenientes, es segura y aceptada en varios establecimientos”, afirma Chavarría.
Al momento de usar su tarjeta de débito, es necesario asegurarse de conocer el saldo de la cuenta, pues si intenta gastar más, su compra podría ser rechazada o el banco podría cobrarle un cargo extra, también conocido como cargo por sobregiro.
Cero endeudamiento
Principales beneficios del uso de tarjeta de débito, según www.forbes.com.mx, son los siguientes.
La principal conveniencia de una tarjeta de débito es que facilita no llevar efectivo.
También ayudan a controlar los gastos y el presupuesto, ya que solo se pueden gastar los fondos que se poseen en la cuenta que está ligada a la tarjeta.
Evita inconvenientes respecto del dinero en efectivo, como el riesgo de recibir billetes falsos o monedas de pequeña o de alta denominación.
Si realiza viajes fuera del país, puede utilizar la tarjeta en caso de que el efectivo que lleve no le alcance, u obtener dinero de cajeros automáticos.