También se decidió no aprobar la solicitud de emisión por Q1 mil 663 millones de bonos del Tesoro que hizo el Gobierno el pasado 1 de febrero al Congreso.
En la liberación de la deuda bonificable, explicó Flores, esta tendría un destino específico, es decir, se trasladaría a otras asignaciones que no habían sido incluidas en la propuesta original del Ejecutivo.
Los montos de asignación se estarán definiendo en los siguientes días, aunque adelantó que se podrían destinar Q200 millones a atender la crisis alimentaria por la sequía.
La propuesta original de la solicitud de los bonos era cubrir fondos para Ministerio Público, Organismo Judicial, Universidad de San Carlos, programas de Incentivos Forestales (Pinfor) y de Incentivos para Pequeños Poseedores de tierras y vocación Forestal y Agroforestal (Pinpep) y transporte urbano de la capital del país.
La nueva configuración favorece a los ministerios de Salud y Gobernación, —aunque no incluye el pago de la deuda acumulada—, corredor seco y Pinpep, y se eliminaría el rubro del Pinfor.
Para este ejercicio entró en vigencia una norma según la cual se debe colocar el 50% de los bonos en el primer semestre, que equivale a Q4 mil 700 millones, y el resto en el siguiente semestre.
Ahora, con lo acordado ayer, Finanzas dispondrá de los recursos en un solo tramo.
Según Flores, el dictamen podría estar listo en las siguientes dos semanas y después de Semana Santa se le presentaría al pleno legislativo, para que en abril el Ejecutivo disponga de los recursos.
Otra situación que se considera es la eliminación del pago de las deficiencias netas del Banco de Guatemala (Banguat) por Q1 mil 700 millones, y que ese dinero se destine al funcionamiento estatal.
Ajustes razonables
“Entendemos que hay una demanda política de otras entidades y lo vamos a llevar con cuidado para que no se desbalancee el presupuesto”, que queda en Q70 mil 700 millones, aseguró el ministro de Finanzas, Julio Estrada.
Según el funcionario, la medida implicará la reducción de gasto en algunas instituciones.
Flores explicó que en los siguientes meses el Gobierno deberá agilizar la gestión de US$400 millones en préstamos con organismos internacionales, para que tenga liquidez en el segundo semestre del año.
