Economía

Fuente de inspiración

Desde el comienzo de la unión aduanera con Honduras, el proceso ha registrado que el 75% de operaciones se originan en Guatemala.

Esa “inspiración” animó al Gobierno de El Salvador a solicitar formalmente su adhesión al proceso.

Recientemente, el ministro de Economía de El Salvador hizo referencia a tres elementos de la integración económica centroamericana; la estrategia centroamericana de facilitación del comercio y competitividad con énfasis en la gestión coordinada de fronteras”. La aprobación del Reglamento de Controles y Procedimientos Integrados en los Puestos Fronterizos Terrestres y Manual operativo del puesto fronterizo de La Hachadura (ES) y Pedro de Alvarado (GU); y el Marco conceptual del Puesto Fronterizo El Amatillo”.

Según los estudios del Banco Mundial, esta integración más profunda puede significar una reducción de los costos logísticos hasta en 25%.

A partir de la inauguración del puesto fronterizo de Corinto, con Honduras, se han registrado más de 700 operaciones utilizando el Formulario Aduanero Único Centroamericano (FYDUCA), donde el 75% de las operaciones se originan en Guatemala.

Si bien es cierto estas operaciones no vienen amparadas por la FYDUCA, instrumento principal de la unión aduanera, da una idea del volumen que se tendrá en esa frontera una vez la UA funcione plenamente.

Ya se ha dicho en esta columna, ni los aspectos tecnológicos ni los operativos han sido fáciles de resolver. Ya la semana pasada, los sistemas informáticos de la SAT de Guatemala han sido objeto de continuos ataques informáticos, lo cual viene a complicar el mismo proceso de la UA.

No olvidemos la importancia comercial de Centroamérica para ella misma, según reportes de la Sieca. “Las exportaciones totales de Centroamérica suman US$7 mil 811 millones en el 2017, superando el desempeño exportador en el mismo período en el año 2016, con un incremento interanual del 14.0%. Durante el primer trimestre del 2017, el 28.9% de las exportaciones centroamericanas se realizaron en el mercado intrarregional”.

Principalmente productos del sector industrial y alimentario, como los medicamentos (4.6%), artículos para el envasado de plástico (3.6%), preparaciones alimenticias (3.3%), productos de panadería, pastelería o galletería (3.3%) y agua, incluidas el agua mineral y gaseada (2.7%).

Los gobiernos no crean el comercio, pero sí tienen la obligación de facilitarlo en el contexto de los controles fiscales y parafiscales. La adhesión de El Salvador es un nuevo reto para todos.