El dinero, que se inyectará progresivamente a través de un plan de 10 años, servirá para mejorar el acceso a los recursos naturales e invertir y avanzar en eficiencia energética y en energía solar y eólica.
“Con esta inversión se podrá incrementar el desarrollo económico y reducir las emisiones nocivas” , explicó Cuomo, que se mostró orgulloso de que el estado sirva de “ejemplo para el futuro” .
Más de la mitad del dinero del fondo (US$2 mil 700 millones) fomentará el desarrollo del mercado de energías alternativas y sostenibles, y deberá dedicarse a iniciativas que beneficien a las rentas bajas y medias en los primeros tres años del fondo.
La industria y el mercado de la energía solar recibirán US$961 millones para mejorar su “accesibilidad” y el Banco Verde de Nueva York recibirá 782 millones para “impulsar la inversión del sector privado en energía sostenible” .
Los 717 millones restantes irán destinados a promover a investigación, desarrollo e innovación. Cuomo indicó que esta inversión en eficiencia energética “ahorrará hasta US$39 mil millones en los próximos 10 años” a los ciudadanos de Nueva York, haciendo las energías renovables más asequibles y más accesibles para los consumidores.