El acuerdo entre los dos gigantes de la tecnología llega a raíz de que en agosto del año pasado Microsoft denunciara a su competidor surcoreano bajo la acusación de haber roto un acuerdo sobre patentes suscrito entre ambas empresas en 2011.
Según aquel acuerdo Samsung Electronics se comprometía a pagar a Microsoft por hacer uso de sus patentes empleadas en el sistema operativo Android de Google para teléfonos inteligentes.
La firma fundada por Bill Gates solicitó a la justicia de EEUU que confirmara la validez o no del pacto suscrito con Samsung, y reclamó una indemnización a esta última porque se negó a seguir realizando los pagos después de que Microsoft sellara su adquisición de la empresa finlandesa Nokia.
Tras la demanda presentada por Microsoft, el gigante surcoreano presentó como respuesta el pasado octubre una petición de arbitraje ante la Cámara de Comercio Internacional con sede en Hong Kong.
Samsung argumentó que la adquisición de Nokia por parte de Microsoft violaba su acuerdo de licencias de 2011, por lo que dejó de pagar a la compañía estadounidense 6,9 millones de dólares en concepto de intereses.