Jorge Mario del Cid, presidente del Comité de Cardamomo de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), refirió que “el problema se está haciendo grande, por lo que es necesario capacitar a los productores, pues el 35% de la producción presenta daños”.
El país produjo el año pasado 37 mil toneladas métricas de cardamomo y para este año se esperan de 35 mil a 37 mil toneladas métricas, según Agexport.
Los principales mercados a los que se envía el producto son Países Árabes, India, Unión Europea y Estados Unidos.
Unos 300 mil productores son los que se dedican a esta actividad principalmente en Quiché, Alta y Baja Verapaz, Izabal, Chiquimula y Zacapa.
“Las plantaciones del Valle de Polochic, Sierra de las Minas, Cobán y Cahabón, en Alta Verapaz, son los lugares que tienen la mayor presencia de trips”, explicó Patricio Quinteros, presidente de la Asociación de Cardamomeros de Guatemala (Cardegua).
Ovidio Fernández, productor de Alta Verapaz, refirió: “Nuestras plantaciones tenían presencia del insecto en 60%, pero con buenas prácticas agrícolas hemos reducido el impacto al 5%”, añadió.
Además de que la picadura del insecto trips daña el cardamomo y baja la calidad del producto, el precio también reporta una caída.
En el 2007, el quintal de cardamomo pergamino se vendía a unos Q5 mil, mientras que ahora alcanza los Q2 mil 500.
“Es importante contar con buenas prácticas agrícolas porque existe mucho mercado para el producto; nosotros vendemos hasta la cáscara del cardamomo”, agregó Fernández.
El quintal de cardamomo cereza se vende de Q250 a Q350 sin daño del insecto y puede llegar a costar unos Q100 con daño del trips.
El ingreso de divisas por exportación de cardamomo durante el 2012 fue de US$250 millones, el año pasado llegó a los US$217 millones, y para este año se calcula que podría alcanzar los US$225 millones, según datos del Banguat y Agexport.
Seguimiento de campaña
El sector exportador anunció que la creación de la mesa se une a los esfuerzos de la campaña “Chabil tzi rubel mu” —El buen cardamomo se da bajo la sombra—, con lo que han llegado al 10 por ciento de las comunidades impactadas.
“Se ha invertido Q1 millón en esa campaña con la que se ha transferido tecnología, y Cardegua también ha invertido en capacitar a los cardamomeros”, explicó Ricardo Santa Cruz, director del sector agrícola de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport).