Puso como ejemplo que en 1998, con el huracán Mitch, se pagaron Q627 millones; en 2005, con el Stan, los desembolsos ascendieron a Q295 millones; en 2008, con la depresión tropical número 16, Q266 millones; mientras que en 2010, con Ágatha, se desembolsaron Q578 millones.
Nolasco llamó la atención sobre la importancia de contar con seguros, tanto para los bienes muebles privados como para la infraestructura pública.
Según refirió, en el 2010 los daños en viviendas, puentes, tramos carreteros y puentes por las erupciones del Volcán de Pacaya y de la tormenta Ágatha sumaron Q12 mil 400 millones, de los cuales el Gobierno solo ha logrado cancelar el 60%.
Salvador Leiva, presidente de Agis, comentó que los terremotos de San Marcos no representaron costos altos.
En el 2012, dijo, se pagaron alrededor de Q19 millones, y este año se calculan entre Q9 y Q10 millones, debido a la poca penetración del seguro.
Leiva reportó que en la actualidad, el 90% de casas e industrias del país no están aseguradas y el 95% de la infraestructura carece de seguro.
Agregó que el mercado ofrece primas accesibles a todos los bolsillos. Por ejemplo, según Agis, una vivienda de aproximadamente Q200 mil se puede asegurar a partir de Q50 mensuales. En el primer semestre del año, las aseguradoras pagaron Q1 mil 299 millones.
2,495 MILLONES
de quetzales es el monto acumulado de lo pagado por siniestros naturales en 15 años.
627 MILLONES
de quetzales se pagaron en daños en 1998. Este año fue el Mitch.
295 MILLONES
de quetzales se pagaron en daños en 2005, cuando se dio el Stan.
1,299 MILLONES
de quetzales se pagaron en siniestros en el primer semestre.
266 MILLONES
de quetzales fueron en 2008, por la depresión No. 16.
578 MILLONES
de quetzales se pagaron en daños en 2010. Este año fue Ágatha.