Para atender la emergencia, el Gobierno declaró estado de Calamidad Pública, mientras la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) se declaró en alerta amarilla institucional.
Hasta el 9 de agosto se habían detectado 10 mil 83 niños con desnutrición aguda en el país, pero no son afectados por la emergencia, pues esta se agudizará a finales del año, según Monterroso.
“Con estas intervenciones estamos evitando que haya una crisis humanitaria que se pudiera dar en noviembre y diciembre y el primer trimestre del próximo año. Las familias dejarán de tener reservas de alimentos. Tenemos listas 26 mil raciones para entregar a los más afectados”, afirmó.
Además de esas raciones, que contienen maíz, frijol, harina de soya y maíz fortificado, el Gobierno asegura que tiene tres mil 183 cajas de alimento terapéutico listo para el consumo, el cual se utiliza para la recuperación de niños con desnutrición aguda en forma rápida y adecuada.
DESCARGA- Vea el PDF de los efectos de la canícula prolongada.
Pérdidas millonarias
Las pérdidas por la destrucción de las cosechas se calculan en Q450 millones, según el ministro de Agricultura, Élmer López. Los granos afectados son maíz, frijol, maicillo y, en algunos lugares, ajonjolí.
El ministro dijo que Jutiapa, Chiquimula, Zacapa y El Progreso son los departamentos con más problemas, aunque también están priorizados Santa Rosa, Quiché, Huehuetenango, Baja Verapaz, Retalhuleu, Sololá, Totonicapán, Chimaltenango, San Marcos, Guatemala, Suchitepéquez y Jalapa.
Según López, para atender la emergencia necesitan Q110 millones mensuales y deben comprar alimentos de inmediato.
Agregó que para evitar situaciones similares en los próximos años, el Ministerio de Agricultura prevé un plan para reserva de agua, que podría empezar en el Corredor Seco, para lo cual solicitaron Q100 millones adicionales.
En calamidad
Ayer, durante la reunión de Gabinete, el presidente Otto Pérez Molina firmó el acuerdo gubernativo para declarar estado de Calamidad Pública.
Según la Ley de Orden Público, de rango constitucional, esta figura busca evitar o reducir los efectos de cualquier calamidad. Permite centralizar, en la entidad que el decreto señale, los servicios públicos, estatales y privados.
El Ejecutivo tiene potestad de establecer precios máximos o mínimos para los artículos de primera necesidad.
Por la tarde, Alejandro Maldonado, secretario ejecutivo de la Conred, declaró la alerta amarilla institucional, a fin de accionar en forma inmediata ante cualquier desastre.
Maldonado explicó que la institución tiene un protocolo que considera el comportamiento variable de la lluvia, el cual se enfoca en lo agropecuario, energía, salud, agua y saneamiento y forestal, y tiene acciones concretas para aplicar.
David de León, vocero de la Conred, informó que la alerta “se declara cuando un fenómeno puede ocasionar daño”. Explicó que “hay coordinación de planes estipulados, pero aún no hay activación de protocolos específicos”.
Problemas en el 2015
Eddy Sánchez, director del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), indicó que las condiciones climáticas van a cambiar, pero por un período corto.
“Esperamos que en septiembre haya lluvias normales, pero en octubre esperamos que el invierno termine, por el ingreso de frentes fríos”, explicó.
Sánchez resaltó que es un riesgo para toda la región que se fortalezcan las condiciones para que ocurra el fenómeno El Niño, lo que para 2015 podría generar el ingreso del invierno tardío.
“Si el invierno termina en octubre y se extiende más allá de lo normal, las probabilidades con las cosechas podrían tener serias dificultades”, advirtió.
APOYO
Alimentos por trabajo
Autoridades del Ministerio de Agricultura, que visitaron Quiché el fin de semana último, aseguraron que 22 mil familias de 12 municipios afectados por la pérdida total de sus cosechas, a causa de la sequía, serán beneficiadas con alimentos durante seis meses.
Añadieron que los campesinos recibirán alimentos a cambio de trabajo para recuperar las áreas de cultivo que se dañaron.
El ministro de Agricultura, Élmer López, informó que se asistirá a aquellas personas que en realidad hayan perdido sus cultivos, lo que representa la alimentación de sus familias durante un año.
“El Gobierno, a partir de octubre, les proporcionará cada mes un quintal de maíz, 30 libras de frijol y siete kilos de atol”, dijo López.
Añadió que estas raciones no serán gratuitas, pues se pretende que a cambio de los alimentos los beneficiarios hagan tareas de conservación de suelos y agua, siembren árboles y ejecuten obras de beneficio comunitario.-Por Óscar Figueroa
Producción
Pérdida de cosecha
La falta de lluvia impactó el 80% de las cosechas de maíz y frijol, principalmente de Chiquimula, Jutiapa, Zacapa y Jalapa, según Israel Gálvez, director de la Asociación de Desarrollo Comunitario Granero de Oriente.
Para la segunda cosecha, que se empieza a sembrar en estos meses y se levanta en diciembre, el panorama también es desalentador, se indicó.
“Se espera baja calidad del grano, ya que es terrible la situación; algunas familias tienen todavía reservas, pero se están acabando”, añadió Gálvez.
En el caso del café, el 3% de la próxima cosecha (2014-2015), que comienza en octubre y que ya está sembrada, está dañado, según la Asociación Nacional del Café.
En noviembre se abre la ventana para exportar vegetales a Estados Unidos. “Estamos preocupados, pues existe más riesgo de contaminación con las altas temperaturas”, resaltó Ricardo Santa Cruz, director de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport).-Por Roxana Larios
Cifras
56% de las comunidades no tienen posibilidad de siembra.
80% de Maíz se perdió por la prolongación de la sequía
208 Municipios son afectados por la falta de lluvia durante este año.