Decisión Libre 2015

Candidatos tras nichos de votos

Con los dos candidatos presidenciales finalistas confirmados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), comienza la lucha por conquistar a 5.4 millones de votantes: 2.70 millones cuya simpatía fue para el resto de partidos, 2.28 millones que no fueron a votar en la primera vuelta y 251 mil que dejaron la papeleta en blanco más 216 mil que votaron nulo.

Jimmy Morales de FCN-Nación y Sandra Torres del partido UNE, disputaran la presidencia en el balotaje del 25 de octubre. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Jimmy Morales de FCN-Nación y Sandra Torres del partido UNE, disputaran la presidencia en el balotaje del 25 de octubre. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Mientras Jimmy Morales, del Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación), pasó cómodamente a la segunda vuelta, Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), sostuvo una batalla en el conteo con Manuel Baldizón, de Libertad Democrática Renovada (Líder), quien finalmente quedó fuera del balotaje.

Morales triunfó en 10 departamentos: Quetzaltenango, Retalhuleu, Suchitepéquez, Chimaltenango, Sacatepéquez, Guatemala, El Progreso, Zacapa, Santa Rosa y Jutiapa. Torres lo hizo en San Marcos, Quiché, Alta Verapaz, Izabal y Chiquimula, al menos según los resultados hasta antes del 15 de septiembre, ya que el TSE no ha publicado la forma como quedó el mapa electoral por departamentos.

En tanto, Baldizón ganó en Huehuetenango, Totonicapán, Sololá, Petén y Escuintla. En estos y en Jalapa, donde arrasó Mario Estrada, de la Unión del Cambio Nacional (UCN), es donde los finalistas deben concentrarse por ganar simpatías, ya que les será difícil intentar incursionar como los preferidos en los distritos donde ganó el rival.

Petén y Sololá será un reto para ambos, ya que fue donde el presidenciable de Líder obtuvo una mayoría sobre ellos, así como Jalapa, que apoyó en gran cantidad a Estrada y con amplio margen.

Jimmy Morales tiene cuesta arriba departamentos como Huehuetenango y Quiché, por la influencia rural de Baldizón y Torres, pero esta también tiene un reto en Quetzaltenango y el departamento de Guatemala, donde domina FCN-Nación.

Sin aliarse con Líder

Morales afirmó que no se aliaría con partidos políticos “señalados de actos de corrupción”, lo cual arrastraría a Líder, con varios diputados y un excandidato vicepresidencial.

Juan Orozco, del comando de campaña del presidenciable, fue más preciso al señalar que no habrá alianzas con ningún partido.

Torres fue más explícita y desechó la idea de una alianza con Líder, aunque no descartó recibir a sus dirigentes comunitarios. Además, invitó a todos los sectores a “buscar acuerdos” y encontrar soluciones a los problemas nacionales.

De los otros 12 partidos, Líder, Fuerza y la UCN descartaron apoyar a los dos finalistas.

Opciones y desventajas

De acuerdo con el politólogo Franco Martínez, para ambos contendientes aplica que, debido a que el resto de partidos no tiene consistencia ideológica, no serán fáciles los acuerdos.

No obstante, indicó que Morales podría pactar con otros partidos “afines”, como Visión con Valores (Viva), la coalición Compromiso, Renovación y Orden y Partido Unionista (Creo-Unionista), Fuerza, Todos y el Partido de Avanzada Nacional (PAN).

“Con ellos podría hacer más o menos una alianza, no solo en términos del Ejecutivo, sino también del Congreso, si en caso llega a ganar, porque el Gobierno tendría problemas y habría que priorizar la negociación en el Legislativo.

En el caso de Torres, Martínez señaló que podría establecer alianza con partidos pequeños, como Encuentro por Guatemala, y con Winaq y la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG).

Además, no cree que se dé la alianza con Líder. “Lo veo difícil, por la plataforma clientelar del Partido Patriota, que ya ha hecho pública su alianza con FCN-Nación”, subrayó el experto.

El analista político Carlos Martínez indicó que la restricción de Morales es su estructura partidaria, ya que tiene poca presencia en el territorio nacional, lo cual limita su campo de maniobra, contrario a la UNE, que sí cuenta con liderazgos y estructura local.

“En el caso de la UNE, su margen de maniobra es un poco más amplio porque tiene más presencia. Tiene también un poco más de equipo y experiencia política que el de Jimmy Morales. Yo creo que la ventaja que tenía Morales en la primera vuelta, de ser una fuerza nueva, desaparece relativamente para la segunda vuelta”, advirtió.

Martínez enfatizó que Morales tendría que reforzar su estrategia para buscar el voto metropolitano, en tanto que Torres reforzaría la suya para el voto rural y consolidar el apoyo que cada uno tiene en esas áreas.

ESCRITO POR:

Geovanni Contreras

Periodista de Prensa Libre especializado en Política y Poderes, con 21 años de experiencia. Galardonado en el 2017 por su trayectoria por la Embajada de México y la Hemeroteca Nacional Clemente Marroquín Rojas.