Guatemala

“Hay quienes salen de casa buscando pelear”

Gritar o bocinar en el tráfico podría ser un síntoma de estrés o ira, pero existen casos que rebasan los límites, como el ataque o agresiones físicas. Estuardo del Águila, psiquiatra y psicólogo de la Liga Guatemalteca de Higiene Mental, afirma que es necesario fomentar valores y principios en un ambiente que cada día se presenta más convulso.

   

   

Durante el programa Diálogo Libre, a través de PrensaLibre.com, el profesional habló sobre los efectos de vivir en una sociedad donde el pan de cada día es la violencia.

¿Qué pasa por la mente de las personas que agreden a otras por situaciones de tránsito?

Cuando hablamos de la salud mental se habla de una armonía con uno mismo y con los demás.

Lo que estamos viendo acá es que las personas han ido perdiendo el mismo valor de la vida o se ha ido perdiendo esa parte del derecho a la vida. El hecho de pensar que mi vida depende de la otra persona porque me da o no la vía, porque me mira bien o me mira mal, va causando carga de estrés    hacia nuestro lugar de trabajo.

Cotidianamente vivimos en una Guatemala donde el nivel de vehículos ya sobrepasó la capacidad que las carreteras tienen.

¿Cuál es el perfil de las personas que se alteran y agreden a otras por el simple hecho de bocinar?

El fin es demostrar poder sobre la otra persona. La forma inadecuada que le da un arma a un ser humano es ese hecho de creer tener el poder sobre el otro, de intimidarlo, de hacerlo de menos, incluso de quitarle la vida.

En esta cotidianidad no podemos hablar de un perfil psicológico directamente, sino que es el entorno; el hecho es el mal manejo de las emociones y de nuestro carácter.

¿Qué recomienda hacer para mantener la calma?

Hay gente que sugiere escuchar música, ir relajado o subir los vidrios; pero el problema es más de fondo, y ese fondo es el respeto.

No por escuchar buena música o porque voy con mi familia me van a dejar de hacer algo. El punto es que la otra persona no tiene el derecho a agredirme ni a violentarme por el hecho de que él va tarde o que no le quise dar la vía.

¿Cómo se puede interpretar este fenómeno de violencia en el país?

Podemos comenzar a hablar de los diferentes tipos de violencia; en este caso hay violencia política y violencia instrumental. Esta última es la que busca sentar precedentes o enviar una información hacia las personas que están alrededor de la víctima.

Regularmente es la más común, porque tiene un objetivo: intimidación, represión e incluso silenciar. Lo que causa es que vivamos inseguros, con temor, nos encerremos en colonias con garitas porque llegamos a decir: “Ya ni en mi casa estoy seguro”.

¿Cómo afecta psicológicamente a la niñez la inseguridad?

Es bastante lamentable, porque los niños, incluso la misma juventud, están creciendo sin oportunidades de poder desarrollarse.

Como seres humanos necesitamos del otro para podernos desarrollar. En este caso, los amigos de los niños están en el colegio o se convierten en sus mejores amigos, que no es malo, el hermano, los papás o la abuelita, porque se están encerrando en ellos mismos.

Eso va a ir afectando en el desarrollo de ellos cuando sean adultos, el no poder tener una buena relación con las personas, no poder solucionar problemas, incluso de vivir intimidado.

¿Deben los centros escolares aportar apoyo psicológico adecuado a los niños, inclusive contra el acoso?

El acoso escolar o el bullying es una manifestación más de la violencia que ha logrado implementarse en las escuelas y los colegios, no importando el estrato social. Claro que los centros estudiantiles tienen la responsabilidad también de prevenir o de hacer campañas de prevención ante la violencia, tanto familiar como escolar.

¿Han llegado a la Liga de Higiene Mental personas por auxilio porque no pueden controlar emociones violentas?

Llegan muchas personas con esta problemática. Regularmente desde que se aborda a estas personas comenzamos a buscar estrategias para ayudar a calmar los detonantes de violencia que manifiesten; si no, se corre el riesgo de que la persona actúe en cualquier lugar de forma violenta y dañando a los demás.

Hay personas que salen de casa buscando con quien pelear, y a veces se topan con personas más violentas, y el daño es para ellas.

Lo que buscamos es un espacio de desahogo por medio de la terapia, que busca equilibrar la parte personal, social, ambiental y en la parte espiritual para poder convivir de forma de bienestar.

¿Hay una campaña de sensibilización para conductores para evitar tragedias en el tránsito?

El hecho es el manejo del estrés; no podemos llegar a todos, pero sí hacernos más responsables de nuestros actos.

Algo muy importante es el hecho de que las personas sepan que alguien los espera en casa y de que alguien espera en casa a la otra persona.

El ser humano tiene que reencontrarse con él mismo y con la sociedad, con esa sociedad que le da la oportunidad de vivir, de desarrollarse, de ser feliz, amar, sentir y sorprenderse también.

¿Cómo orientar a los pilotos con el uso de bicicletas o motocicletas?

El problema no es tanto el transporte, es la actitud; los propios valores que como seres humanos podamos ir cultivando y transmitiendo a los demás.

El hecho de ser un transporte de dos personas o de una, no quiere decir que sea bueno o malo porque los motoristas fueron estigmatizados de ser unos delincuentes.

¿Cuál es la recomendación para los que portan armas de fuego y las usan para agredir, y no en defensa propia?

Tendría que haber una regularización con respecto a eso.

Personas civiles creo que no deberían andar armadas, porque si uno carga un arma es para matar. Si tenemos armas de fuego es porque nos sentimos amenazados y porque vamos a tener la necesidad de dañar a las otras personas. El que cargue un arma de fuego tiene que hacerse responsable.

ESCRITO POR:

ARCHIVADO EN: