Cifuentes Cano era el director de una división policial y trabajaba estrechamente con el Ejército en operativos contrainsurgentes, durante el Gobierno de facto del dictador Efraín Ríos Montt (1982-1983), según explicó la Fiscalía ante el Juzgado Quinto de Primera Instancia Penal.
Al excomandante se le sindica de la desaparición forzada el 22 de noviembre de 1988 de las estudiantes universitarias Luz Hernández y Ana López, quienes 40 años después aún no han sido localizadas.
Además, Cifuentes Cano es acusado de ordenar el asesinato de los civiles Venancio Hernández y Leandro Calate.
“Finalmente podemos escuchar públicamente la maldad que fue practicada y esperamos conocer dónde está el cuerpo de Luz Hernández”, declaró ante periodistas una familiar de una de las dos estudiantes desaparecidas.
Los delitos de los que se le sindica a Cifuentes Cano sucedieron durante el conflicto armado interno en Guatemala que dejó más de 200 mil muertos y 50 mil desaparecidos entre 1960 y 1996, en un enfrentamiento entre la guerrilla y las fuerzas de seguridad, considerado uno de los más sangrientos de Latinoamérica.
