El historiador Fernando Urquizú dijo que el nombre original era Sacluc, pero ganaderos de Yucatán, México, se establecieron en el lugar y le pusieron Guadalupe Sacluc.
Indicó que esta advocación se convirtió en uno de los íconos del nacionalismo criollo, el cual alimentó movimientos independentistas en México y en otros lugares; sin embargo, en la década de 1880, dentro del contexto de la reforma liberal, Guadalupe Sacluc fue rebautizada con el nombre de La Libertad, pues este es un concepto cívico emblemático de esa ideología.
Francisco Alejandro Cortés, párroco de la iglesia de La Libertad, expresó: “La fiesta se celebra del 3 al 12 de diciembre. La imagen que utilizamos fue traída por una familia mexicana, que la donó”.
Relató que la procesión recorre calles del área urbana, mientras los feligreses portan ramos de flores y cantan alabanzas.
Vicenta del Carmen Durán, devota, compartió que lleva algunos años de elaborar arreglos florales para adornar la parroquia, en especial el día de la Virgen de Guadalupe.
La vecina Leydi González manifestó: “Tengo 29 años de edad, y desde pequeña mis padres me inculcaron la fervor a la Virgen, por lo que aporto trabajo a la parroquia”.
Otra celebración singular se lleva a cabo en Totonicapán, donde la Casa de la Cultura organiza un certamen de trajes típicos.
En Lívingston, Izabal, feligreses presentan danzas y cantos garífunas vestidas con atuendos indígenas.
Con información de: L. Sión, W. Obando, R. Miranda, O. Figueroa y E. Domínguez.