Renovación con calcomanía no es suficiente

Del aeropuerto La Aurora, en Guatemala, al Internacional de Sao Paulo, Brasil, todo bien. La pesadilla de Mónica Garzaro  y su hijo, de 9 años, comenzó al intentar abordar el vuelo 223 de South African Airways: los pasaportes no eran válidos. 

Aeropuerto de Congonhas Sao Paulo, Brasil. Allí se le prohibió a Mónica Garzaro abordar su vuelo a Sudáfrica por no tener un pasaporte vigente. (Foto Prensa Libre: Aeropuertos.Net)
Aeropuerto de Congonhas Sao Paulo, Brasil. Allí se le prohibió a Mónica Garzaro abordar su vuelo a Sudáfrica por no tener un pasaporte vigente. (Foto Prensa Libre: Aeropuertos.Net)

Fallidos intentos entre el consulado de Guatemala y Sudáfrica le llevaron una semana a Mónica en Brasil. Al final regresó a Guatemala sin haber cumplido sus planes.

“El Gobierno de Guatemala tiene la obligación de informar a sus ciudadanos sobre los pasaportes extendidos”, opina Mónica. “¿Quién le informa a uno a dónde viajar o no con estos pasaportes de pacotilla?”, criticó.

Mónica tuvo que viajar a  la Ciudad de México para solicitar la visa a Sudáfrica —en Guatemala no hay representación consular de ese país—, pero su pasaporte venció y fue revalidado por la Dirección General de Migración (DGM) con una calcomanía.

El pasaporte guatemalteco tiene  vigencia de cinco años, desde su emisión, y por US$30 —unos Q240— se revalida por el mismo tiempo; sin embargo, problemas administrativos retrasaron el proceso de compras de libretas y Migración tomó como alternativa la calcomanía.

La solución que el consulado de Guatemala en Brasil le ofreció a Mónica fue un nuevo pasaporte, en dos meses. La   alternativa fue regresar  a Guatemala y perder boletos de avión y el hospedaje reservado.

La directora de Migración, Carolina Miranda, aseguró que todos los países aceptan como válido el pasaporte con calcomanía.

“Hemos estado en constante monitoreo y reiterando esa renovación excepcional”, afirmó Miranda.

Ahora el Congreso autorizó la compra de 500 mil libretas, lote que cubrirá la demanda de pasaportes hasta febrero de 2018, informó la funcionaria.

La falta de cartillas causó también problemas a los guatemaltecos migrantes en EE. UU., y en el primer trimestre del 2017 se acumulaban 45 mil  pasaportes pendientes de emitir. Aunque la cifra ha bajado, aún se trabaja para agilizar la impresión de documentos y cubrir una demanda de hasta  mil  al día.

El problema de pasaportes también afecta a guatemaltecos en la provincia, ya que se debe  esperar hasta una semana para la emisión del documento, trámite que en la capital  dura unos 45 minutos. 

Vilma Pérez, por ejemplo, salió a las 4 horas de Huehuetenango y cuatro horas después estaba en la capital esperando por su pasaporte.  Ella  pudo ahorrarse tres horas de viaje y solicitar el documento en Quetzaltenango, pero allí el trámite tarda ocho días.