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El conflicto de una madre moderna

La mujer de hoy en di?a, sale a trabajar, y se mantiene un promedio de cinco a ocho horas fuera del hogar. Esta situacio?n se presenta ya sea por su necesidad de realizar una vida profesional y personal plena, en unos casos, y econo?mica, en otros.

06/05/1998. La mujer en la actualidad debe desempeñar su rol de madre y profesional. (Foto: Hemeroteca PL)

06/05/1998. La mujer en la actualidad debe desempeñar su rol de madre y profesional. (Foto: Hemeroteca PL)

Y es que el requerimiento de dos fuentes de ingreso en la familia promedio guatemalteca es cada vez ma?s comu?n, planteando un cambio en el funcionamiento y administracio?n del hogar.

La adaptabilidad de la mujer para el desempen?o de todos sus roles es vital para mantener un equilibrio en la familia. La figura de madre ha sufrido una serie de cambios a rai?z de este nuevo orden. Una mama? de los noventa es tambie?n profesional, empleada o jefa, empresaria, además de esposa y amante.

Esta multiplicidad de roles divide el tiempo de la mujer en una forma que no siempre es voluntaria, ocasionando en muchas de ellas, un sentimiento de culpa que dificulta su situacio?n.

La culpa, que muchas madres sienten por dejar a su bebe? en manos ajenas, se deriva de un patro?n cultural en el que la madre tiene como u?nica funcio?n velar por el bienestar de los hijos. Este concepto fue va?lido en una e?poca en la que las mujeres no teni?an cabida en el mundo econo?mico ni en las decisiones poli?ticas de su sociedad.

Estar consciente de los beneficios que el trabajo trae para la calidad de vida de la familia, es la mejor forma de vencer el sentimiento de culpa, expone Rosali?a Jua?rez, psico?loga del Instituto de Psicologi?a Aplicada, IPSA.

Detra?s del sentimiento de culpa de una madre, pueden existir situaciones a nivel inconsciente que en algunos casos vienen de su propia infancia. La decisio?n de no exponer a los hijos a los agravios que la madre sufrio? de nin?a, pueden constituir una de las causas ma?s importantes de frustracio?n.

Estas emociones, mal manejadas, se constituyen en obsta?culos para el buen desempen?o de labores, y pueden llevarla, incluso, a la depresio?n.

La presencia psicolo?gica es la que promueve el desarrollo del nin?o, no la presencia fi?sica, comenta la licenciada Jua?rez. Los lazos de afectividad entre los miembros de la familia se estrechan a trave?s de la sana comunicacio?n, no por la presencia constante de la madre. El concepto que se debe manejar en cuanto a cuidado de los nin?os es la calidad de tiempo. Esta incluye atencio?n personalizada, carin?o y disciplina.

Cuando un niño resiente

El comportamiento de un nin?o o nin?a que resiente la situacio?n de ausencia de la madre, se ve alterado. Busca captar la atencio?n de sus padres en forma inconsciente. Puede aumentar su tendencia a hacer berrinches, desafi?a la autoridad de la persona que lo cuida, puede inclusive enfermarse o intensificar padecimientos me?dicos.

Exacerbación de asma y de problemas digestivos, son comunes en nin?os que atraviesan crisis emocionales. En los nin?os y nin?as mayores se manifiestan adema?s, cambios en sus relaciones interpersonales, pueden convertirse en nin?os apartados y ti?midos.

La pregunta importante es ¿Por qué? el nin?o resiente que la mama? se vaya?, sen?ala Jua?rez. Las condiciones en las que el nin?o o nin?a se queda son clave para evitar este tipo de situaciones.

Tanto la actitud de la madre al dejarlo, como el trato que recibe y el ambiente, influyen en co?mo el nin?o maneje la ausencia de su madre. Si se dan estos problemas, es necesario que los padres investiguen y establezcan las razones de su reaccio?n.
El apoyo del padre es de vital importancia. La comunicacio?n entre todos los miembros de la familia asegura que cada uno pueda desarrollarse plenamente.

Si no existe una comunio?n de ideas y principios en la pareja, en cuanto a la educacio?n de los nin?os se refiere, es difi?cil que los nin?os se sientan en un ambiente seguro y estable.

Esta nueva organizacio?n de la familia representa para el padre una readecuacio?n de su rol en el hogar. Las tareas y oficios deben ser ahora compartidos, esto incluye la formacio?n y cuidado de los hijos. El cuidado y compan?i?a de una madre para con su hijo es sumamente importante.

Esta cercani?a debe prevalecer para el sano desarrollo del nin?o o nin?a. Por eso, se recomienda que la persona que sustituira? estos cuidados durante la jornada de trabajo, provea tambie?n un ambiente afectivo y de seguridad emocional para el nin?o.
Es importante que los padres le indiquen a la persona que cuidara? al nin?o o nin?a, la forma en que quieren que su hijo o hija sea tratado. Procuren que las condiciones en que dejara? al nin?o sean de su total aprobacio?n, para mitigar la ansiedad que puedan sentir.

La alternativa de los colegios maternales, para nin?os de un an?o y medio a tres an?os es atractiva, sobre todo cuando no existe una persona de confianza con quien dejarlo.

Adema?s de hacerse responsable de la seguridad de los nin?os, las “casa-cuna” tienen programas de estimulacio?n temprana con las que se persigue el desarrollo de destrezas básicas para su crecimiento.

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