Hemeroteca

2003: monseñor Quezada es nombrado Cardenal

En medio del júbilo de los católicos, Prensa Libre informaba en su edición del 29 de septiembre de 2003 la designación como Cardenal del Arzobispo Metropolitano Monseñor Rodolfo Quezada Toruño.

Titular de Prensa Libre del 29/09/2003. (Foto: Hemeroteca PL)

Titular de Prensa Libre del 29/09/2003. (Foto: Hemeroteca PL)

Con cohetillos frente a la Catedral Metropolitana y felicitaciones de varias personalidades fue recibida un día antes la noticia del Vaticano: el Papa Juan Pablo II había designado como miembro del Colegio Cardenalicio a monseñor Quezada.

Durante su mensaje tradicional del domingo en la Plaza de San Pedro, el Santo Padre leyó una lista de 31 obispos de todo el mundo, en la que se incluyó el nombre de Quezada Toruño, quienes serían investidos como cardenales, según información de agencias de noticias.

La trayectoria de monseñor Quezada Toruño, marcada por una constante lucha por los derechos humanos y el papel de conciliador durante el conflicto armado, fue determinante para su designación. Su labor no fue sólo reconocida en el país, sino también en todas las esferas del Vaticano, desde párrocos en Roma, cardenales y funcionarios de la Santa Sede.

“El Santo Padre ha considerado que el Arzobispo tiene los méritos para el cargo -cardenal- y merecía esta distinción”, señaló monseñor Ramiro Molliner, Nuncio Apostólico. Al formar parte del Colegio Cardenalicio podrá participar en el cónclave cuando se tenga que elegir al sucesor del Papa.

Quezada es el segundo arzobispo guatemalteco nombrado Cardenal, luego de que a monseñor Mario Casariego y Acevedo le fuera impuesto el capelo cardenalicio en 1969.

Honrado

El día anterior, 28 de septiembre, la celebración de la tradicional misa dominical en la Catedral Metropolitana, fue un hecho histórico para monseñor, que en la homilía manifestó su agradecimiento al Papa.

“Esta designación es una nueva prueba del inmenso cariño de Su Santidad hacia nuestro país, en especial para la Iglesia, cuya misión en los últimos años ha sido rubricada con la sangre de numerosos testigos de la fe”, expuso al leer la carta de agradecimiento que enviaría a la Santa Sede.

Luego de la lectura, los feligreses aplaudieron mientras repicaban las campanas de la Catedral y devotos quemaban cohetillos. “Es una satisfacción para el pueblo católico la designación como cardenal, ya que es una apoyo espiritual para el país, por los momentos que estamos viviendo”, manifestó un feligrés. Representantes de la congregación de Hijas de Santa María del Corazón de Jesús expresaron su agradecimiento, proque es “un regalo del Santo Padre para la Iglesia chapina”.

Monseñor Quezada indicó que al recibir la distinción de cardenal, el Papa Juan Pablo II honraba a la Iglesia Católica y a los guatemaltecos. “Me siento muy digno con esta distinción del Santo Padre, quien demuestra el cariño especial que tiene a Guatemala. Fue un hecho extraordinario que nos visitara tres veces, y ha venido en los momentos más difíciles” expresó. El día 21 de octubre del mismo año recibió el nombramiento como Cardenal de manos del Papa Juan Pablo II junto a 30 obispos de todo el mundo en el marco de las Bodas de Plata del Pontificado.

Trayectoria

  • Nació en la ciudad de Guatemala el 8 de marzo de 1932.
  • Fue ordenado sacerdote el 21 de septiembre de 1956 por monseñor Mariano Rossell Arellano.
  • En 1972 se le nombró obispo auxiliar de Zacapa y en 1986 fue consagrado prelado de Esquipulas.
  • Fue doctor en Derecho Canónico.
  • Fungió como mediador entre el Gobierno y la URNG para conseguir los acuerdos de paz.
  • En junio de 2001 fue nombrado por el Papa Juan Pablo II Arzobispo Metropolitano.
  • El 21 de octubre de 2003 recibió la birreta roja y el título de San Saturnino de Roma como Cardenal de la Iglesia.
  • El 18 y 19 de abril de 2005 participó en el cónclave para elegir al sucesor de Juan Pablo II.
  • El 2 de octubre de 2010 presentó su renuncia al Papa Benedicto XVI como Arzobispo al cumplir los 75 años.
  • El 4 de junio de 2012 falleció a consecuencia del cáncer, siendo sepultado en la Capilla de Santiago de la Catedral.

ESCRITO POR: