Las comunicaciones telefónicas y de télex de México con el exterior quedaron interrumpidas y la televisión y radios eran el principal vínculo del país. La cadena local colombiana Caracol, captando emisiones de la televisión mexicana en Bogotá, dijo que cuatro hospitales dañados por el terremoto fueron evacuados y un hotel se derrumbó en la zona central de la capital.

Un funcionario de la Cruz Roja dijo a un periodista de la televisión desde el centro de México que se habían rescatado numerosos cuerpos y que la cifra de víctimas fatales podría ser de varios centenares. El gobierno declaró en estado de desastre el área del distrito Federal de México.

El presidente Miguel de La Madrid concurrió a las zonas más afectadas de la capital para enterarse directamente de la situación y declaró que prefería no dar una estimación de víctimas hasta que se clarificara el panorama. La televisión mexicana captada en Guatemala mostró a los bomberos combatiendo grandes incendios provocados por el sismo en zonas céntricas de la ciudad.

El ministerio de Defensa dijo que se había dispuesto el despliegue de tropas para impedir saqueos y que los residentes fueron exhortados a permanecer en calma. El presidente De La Madrid se reunió con los ministros de Defensa e Interior para coordinar las tareas de rescate, visitando posteriormente las áreas más afectadas, mientras dos helicópteros y 600 motociclistas fueron despachados para inspeccionar los daños. Agregó que todos los hospitales de la capital en condiciones de hacerlo admitían a pacientes con lesiones.

Las cámaras de televisión mostraron escenas de niños asistidos por lesiones frente a su colegio en la avenida Chapultepec, en el centro de la capital, donde columnas de 80 centímetros de ancho cedieron ante el terremoto.

En el resto del país, los Estados más afectados por el sismo fueron los de Michoacán, Guerrero y sur de Jalisco en la región central de México.

En un área de 30 kilómetros cuadrados del sector céntrico de la capital mexicana, 250 edificios se derrumbaron, 50 estaban en riesgo de desplomarse y más de mil registraron serios daños informaban fuentes gubernamentales preliminarmente.

De inmediato unas 50 mil personas que incluyen brigadas especializadas, militares, policías, bomberos y voluntarios, desplegaban una intensa e ininterrumpida labor de excavación en la capital para rescatar a más de un millar de personas que se supone estaban atrapadas bajo los escombros.

Testimonios

Raúl Fernández, un mexicano que sobrevivió a la catástrofe sísmica que vivió México, y algunos de los 210 ocupantes del avión de Iberia que lograron llegar al aeropuerto de México y salir hacia España, relataron al llegar a Madrid la angustia que vivieron en las últimas horas.

Fernández explicó las imágenes que quedaron grabadas en sus ojos, mientras su mujer, llorosa, le acompañaba: ¿El hotel Versalles?… se acabó. México era un caos total. Los edificios están totalmente destruidos, la central telefónica se vino abajo, la televisión… todo. La gente corría espantada por la calle, gritando, llorando, ha sido horroroso.

La zona más afectada fue el centro de México D.F. que es el sitio en que se encuentran los hoteles para los turistas, los barrios residenciales de lujo (Colonia Roma) y las oficinas públicas. Edificios enteros desaparecieron. La torre de radio en donde dos de los más populares locutores, Gustavo Armando Calderón y Sergio Roc, emitían su programa diario, también cayó y los dos periodistas murieron.

Los datos oficiales indicaron que la cifra de muertos fue de 7 mil muertos pero otras fuentes indicaron que en realidad fueron más de 20 mil muertos ya que no se lograron recuperar muchos cadáveres que quedaron entre los escombros de edificios enteros.