En una entrevista con la cadena de televisión rusa RT, Veselnítskaya señaló que lo haría si le dan garantías de seguridad.
“Estoy dispuesta a aclarar la situación en vista de la histeria actual, pero dentro del marco jurídico: o bien a través de los abogados, o con una declaración en el Senado (...)”, señaló.
Según sus palabras, la situación y las noticias relacionadas con este caso que se desarrolla desde hace más de 10 días “es una historia bien dirigida por un manipulador”.
De acuerdo a la abogada, el escándalo sobre la reunión entre Donald Trump Jr. y ella fue orquestado por William Browder, director general del fondo de inversiones Hermitage Capital.
Veselnítskaya aseguró que Browder recopiló información sobre sus hijos, su familia y su estado civil.
“Luego compartió esta información con representantes del Departamento de Estado. No sé para qué lo hicieron”, señaló.
La jurista está convencida de que Browder organizó esta operación de desinformación a gran escala como venganza por la derrota que sufrió en un tribunal de EE. UU. en 2013 ante un equipo de abogados que incluía a la propia Veselnítskaya.
“No tengo ninguna duda de que toda esta información es alimentada e incitada por esta persona para vengarse por el fracaso que sufrió en un Tribunal del distrito sur de Nueva York”, explicó.
El escándalo fue revelado por el diario The New York Times, que informó que el primogénito de Trump, junto al entonces jefe de campaña de Trump, Paul Manafort, y su cuñado, Jared Kushner, se reunieron con esa abogada rusa en junio de 2016, supuestamente para obtener información que perjudicara a la entonces candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillay Clinton.
Poco después, Donald Trump Jr. acabó publicando unos correos de esas fechas en los que acoge con entusiasmo la idea de recibir información sobre Clinton de la abogada rusa.
POR SI SE LO PERDIÓ:
Pero señaló que la reunión fue una “pérdida de tiempo” porque no hubo ninguna información de ese tipo.
La misma abogada, en una entrevista con la cadena NBC, negó que tuviera relación alguna con el Kremlin, y por tanto con la supuesta injerencia rusa en las elecciones de EE. UU.
La trama ha ido creciendo con la aparición de nuevos personajes que estuvieron presentes en la ya famosa reunión.
