“Él hace la comparativa con otros personajes que se han ido a Estados Unidos y que han logrado convenios”, indicó.

En particular mencionó el caso de narcotraficantes como Héctor “El Güero” Palma, uno de los principales socios de Guzmán en la década de los 90, que está por salir de prisión en Estados Unidos después de cumplir nueve años de una condena a 16.

El abogado dijo que Guzmán “no rehuye enfrentar la Justicia americana”, aunque al mismo tiempo peleará en los tribunales contra la decisión de extraditarlo anunciada el viernes por el Gobierno de México.

El líder del cartel de Sinaloa, que se escapó dos veces de cárceles de máxima seguridad y fue recapturado en enero, se enfrenta a cargos en cortes de Texas y California por asociación delictiva, narcotráfico, lavado de dinero, posesión de armas y homicidio, entre otros.

Un abogado en Estados Unidos será el encargado de buscar el acuerdo pero “las condiciones no las va a fijar Joaquín”, dijo Rodríguez. Si se logra el convenio, “apresuraríamos la extradición”, agregó.

Para conseguirlo tiene tres opciones: reconocer su culpabilidad en los cargos que se le imputan, colaborar declarando en contra de terceras personas o realizar actividades encubiertas.

“En su momento platicábamos con Joaquín y él se quedaba con la primera postura: reconocer la culpabilidad en los cargos que se manejan en Estados Unidos”, dijo Rodríguez.

La defensa del “Chapo” tiene 30 días hábiles para presentar recursos de amparo contra la extradición y luego puede pedir revisión si el fallo le resultara desfavorable.

También ha señalado que recurriría a la Suprema Corte o a tribunales supranacionales como la Corte Interamericana de Derechos Humanos.