Su mensaje, leído sólo por sus seguidores -unos 200 entonces- fue reenviado a un empleado del sitio Buzzfeed.com, que le dio una mayor difusión, según medios estadounidenses.
Al aterrizar, Sacco borró su mensaje y su cuenta de Twitter, pero el daño ya estaba hecho, y su comentario la había vuelto blanco de bromas e insultos en las redes sociales, convirtiendo a #JustineSacco en uno de los hashtags más discutidos en Twitter.
Incluso después de que la empresa la despidiera el sábado, la redes sociales se seguían haciendo un festín con el paso en falso de la ejecutiva caída en desgracia.
El domingo el nombre de dominio justinesacco.com dirigía a un sitio web para hacer donaciones para la lucha contra el sida en África.
Los “comentarios ofensivos” de Sacco “no reflejan el punto de vista ni los valores de IAC” , dijo la compañía en un comunicado.
“Tomamos este asunto con mucha seriedad y hemos tomado las medidas del caso con la empleada involucrada” , añadió el comunicado. “No hay excusas para los aborrecibles comentarios hechos y los condenamos tajantemente” , dijo la firma.
Sacco se excusó el domingo en un comunicado citado por ABC News: “Las palabras no pueden decir cuánto lo siento y lo necesario que es que pida disculpas a los sudafricanos” , dijo, recordando que ella nació en Sudáfrica.
“Hay una grave crisis a causa del sida en ese país (…), y por desgracia, es muy fácil hablar con ligereza de una epidemia que nunca se ha enfrentado directamente”, señaló la exrelacionista pública.
“Por ser insensible a esa crisis -que no discrimina por raza, género u orientación sexual, sino que nos aterra a todos de manera uniforme- y por los millones de personas que viven con el virus, siento verg enza” , concluyó Sacco.