Jacob Zuma añadió, siempre según los medios sudafricanos, que le posesión de un animal formaba parte de una tendencia inquietante de los negros a querer imitar a los blancos.
Estos comentarios causaron una ola de protestas de parte de propietarios de animales de todos los orígenes.
Las críticas a Jacob Zuma invadieron las redes sociales.
“Zuma dice que poseer perros no es una costumbre de africanos. A diferencia de esas viejas tradiciones africanas que son poseer un vehículo alemán, vestidos italianos o whisky irlandés”, dijo Tom Eaton en un tuit.
La presidencia sudafricana trató luego de atenuar algunas de esas críticas afirmando que Zuma había intentado “descolonizar la mentalidad africana”.
“El mensaje sólo quería resaltar la necesidad de no poner nuestro amor hacia los animales por encima del que debemos a otros seres humanos”, declaró el portavoz del gobierno, Mac Maharaj.
“Citaba el ejemplo bien conocido de esos sudafricanos sentados con sus perros en la parte delantera de sus camionetas que llevan un obrero atrás aunque esté cayendo una fuerte lluvia o esté haciendo mucho frío”, añadió.
“Otros no dudan en llevar a sus perros a las urgencias veterinarias, pero ignoran a sus obreros cuando están enfermos en el mismo hogar”, dijo también Maharaj para intentar frenar la polémica.