La funcionaria, que pidió el anonimato porque los reglamentos de su despacho le impiden hablar con periodistas, dijo que la Oficina para el Control de Activos en el Extranjero (OFAC por sus siglas en inglés) busca facilitar al público el cumplimiento de la ley removiendo de las listas a entidades que ya no reúnen los requisitos para integrarlas.
Las compañías e individuos que integran la lista de Departamento del tesoro tienen prohibido hacer negocios en Estados Unidos, que impuso un embargo a Cuba en 1962.
De las 45 entidades removidas de la lista 28 son empresas, 11 embarcaciones y seis individuos. Varias de las firmas están vinculadas con la industria del turismo en Cuba, incluyendo líneas de cruceros y cuatro operadoras de turismo. Algunas están en Panamá y dos en Estados Unidos. Varios de los buques sacados de la lista navegan bajo bandera chipriota.
Durante una audiencia celebrada el martes por la subcomisión para América Latina de la cámara baja, la legisladora republicana Ileana Ros-Lehtinen criticó la remoción y la atribuyó al acercamiento diplomático entre Washington y La Habana.
Agregó que la revisión ordenada en diciembre recién pasado por Obama para determinar si Cuba aún debe estar entre las naciones que patrocinan el terrorismo internacional “tiene una conclusión predeterminada. La conclusión es: Saquemos a Cuba de la lista” .
Ros-Lehtinen ha criticado reiteradamente el acercamiento con Cuba porque alega que terminará premiando a un gobierno que sistemáticamente viola los derechos humanos de su población.
Washington analiza si saca o no a Cuba de una lista separada de terrorismo. Los cubanos están presionando por ese paso en momentos en que los dos países negocian los términos para el restablecimiento de embajadas en las dos capitales.