El huracán se desplaza en dirección nor-noroeste a cuatro kilómetros por hora, con vientos sostenidos de 120 kilómetros por hora y rachas de 150 kilómetros por hora.
Debido a las lluvias intensas y fuertes vientos que provoca la proximidad del huracán, las autoridades del estado suspendieron las clases en las escuelas de la costa y tomaron otras medidas preventivas.
Baja California Sur sufrió a inicios de septiembre el paso de la tormenta tropical Lidia, que provocó que en 24 horas cayera el triple del promedio de agua anual en ese estado, lo que provocó la muerte de seis personas, así como inundaciones y daños.
En tanto, una persona está desaparecida y unas 200 casas resultaron dañadas por el agua o las ventiscas en el estado mexicano de Guerrero después de que el huracán Max tocó tierra al este del puerto turístico de Acapulco.