Hassanein era uno de los cuadros más buscados de la rama egipcia de EI, Provincia de Sinaí del Estado Islámico, que antes se llamaba Ansar Beït al-Maqdess.

Ese grupo afirma haber “hecho caer” el avión ruso que se estrelló en el Sinaí el 31 de octubre, causando la muerte de las 224 personas que iban a bordo.

Además de organizar atentados contra las fuerzas de seguridad, Hassanein era acusado por la Policía de haber ordenado la decapitación de un croata, Tomislav Salopek, secuestrado no lejos de El Cairo y de la muerte de estadounidense empleado de una compañía petrolera.

Cuano los policías llegaron al lugar donde se escondía para detenerlo, Hassanein se escapó en un auto en el norte de El Cairo, dijo la Policía.
“Disparó contra los policías pero murió en el tiroteo”, indicó el comunicado del ministerio del Interior.

También en Irak

Las denominadas “Brigadas de Mosul” ejecutaron este lunes a dos cabecillas y dos miembros del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en dos ataques en la ciudad septentrional iraquí de Mosul y sus alrededores.

En un comunicado, las Brigadasc informaron de que una de sus unidades hizo explotar un artefacto al paso de una camioneta en la que viajaba un dirigente del EI, identificado como Abdelsalam Mayid, y otros dos terroristas.

Los tres extremistas resultaron muertos y el vehículo destruido, aseguraron dichas Brigadas, que combaten al EI en la zona de Mosul.

El ataque tuvo lugar en un camino rural que une las aldeas de Al Darauish y Bazuayah, a unos diez kilómetros al norte de Mosul, que está totalmente controlada por el EI.

Asimismo, el grupo armado anunció en otra nota que sus combatientes mataron al cabecilla Saluan Safuan Abeid, apodado Abu Hadid, en la zona de Bab Shams, en el este de Mosul.

Este último era un experto en la fabricación de explosivos en la organización yihadista.

Las “Brigadas de Mosul” fueron creadas a finales del año pasado para combatir y expulsar a los yihadistas de esa ciudad y desde entonces han asumido la autoría de varios ataques contra sus miembros y dirigentes locales.

El 10 de junio de 2014, el EI ocupó Mosul y amplias zonas del norte de Irak, y poco después proclamó un califato en los territorios bajo su control en Irak y en la vecina Siria, donde impuso una interpretación radical de la ley islámica.