“Juro por dios que adoro esta ciudad pero me pregunto si esta ciudad me adora a mí”, escribió Montrell Jackson.
Amigos y familiares de Jackson, de 32 años, lamentan la muerte del veterano de 10 años en la fuerza.
Sus parientes lo describieron como un “gigante gentil” y un “protector” luego que él y otros dos agentes del orden público murieron a balazos el domingo por la mañana a manos de un hombre armado.
El sargento Don Coppola Jr. del Departamento de Policía de Baton Rouge identificó al otro Policía fallecido como Matthew Gerald, de 41 años y quien tenía menos de un año en el departamento.
El tercer agente muerto era Brad Garafola, de 45 años, un adjunto del jefe de Policía con 24 años de experiencia en la fuerza, dijo Casey Rayborn Hicks, vocera de la oficina del jefe policial de East Baton Rouge Parish.
En el comentario publicado en Facebook, Jackson dijo que cuando andaba uniformado recibía miradas agresivas, y que cuando no vestía el uniforme algunos lo consideran una amenaza.
“He vivido tanto en mi corta vida y estos últimos tres días me han puesto a prueba” , escribió en la red social.
El mensaje fue publicado el 8 de julio, apenas tres días después que un afrodescendiente murió a balazos por la policía en Baton Rouge. Ese incidente fue el inicio de una semana extremadamente tensa en la complicada historia de las relaciones raciales de ese país.
Otro afroestadounidense fue muerto a balazos por un policía al día siguiente en Minnesota, y su novia transmitió en vivo un video por Facebook justo después del incidente. Luego un afroestadounidense armado mató a cinco policías durante una protesta en Dallas por los encuentros fatales entre policías y afrodescendientes.
Jackson no se refirió específicamente a esos sucesos, pero los mensajes en Facebook parecían ser una reacción a ellos.