1 Antecedentes judiciales, así como informaciones sobre el estado de salud y las finanzas, son algunos de los elementos que se piratearon.
“Esta mañana presenté mi dimisión al presidente, que la aceptó” , indicó en un comunicado Katherine Archuleta, directora de la Oficina de Administración del Personal del gobierno (OPM, en inglés), explicando que tomaba esta decisión para “permitir que la agencia supere sus desafíos actuales”.
Un alto funcionario de la Casa Blanca dijo que el presidente Barack Obama había “aceptado su dimisión y agradecido a Archuleta sus años de entregado servicio”.
millones de personas están en riesgo de que su información privada sea utilizada con fines ilícitos.
Según la administración estadounidense, se trata de un incidente “distinto pero relacionado” con otro incidente de pirateo que afectó a datos de cuatro millones de funcionarios federales a principios de junio.
Muchos medios de comunicación estadounidenses apuntaron entonces hacia China, que denunció que estas alegaciones eran “irresponsables y sin fundamento”.
La Casa Blanca siempre ha rechazado expresarse sobre este tema. “El hecho de que no demos ninguna información públicamente no quiere decir que no tomemos medidas”, explicó el jueves Michael Daniel, coordinador de ciberseguridad del Consejo de Seguridad Nacional (NSC, en inglés).
El pirateo informático envenena desde hace tiempo las relaciones diplomáticas entre Washington y Pekín.
A finales de junio, en una reunión celebrada en Washington con altos responsables chinos, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, se declaró “profundamente preocupado por las cuestiones de ciberseguridad”, e hizo mención expresa a los “daños causados a empresas estadounidenses”.