Varias encuestas dan a la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD, centroderecha) una ventaja sobre el chavismo en la intención de voto, para lograr al menos la mayoría simple (la mitad más uno de los parlamentarios).
Pero en el sistema electoral venezolano -automatizado- el número de sufragios no necesariamente refleja la cantidad de escaños debido a un complejo método de repartición.
millones de venezolanos acudirán a votar en las elecciones parlamentarias para elegir a 167 legisladores.
“El 40% del electorado (con fuerte componente chavista) termina eligiendo al 60% de los diputados. La oposición necesita una ventaja larga para ganar”, dijo a la AFP Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos de la Universidad Católica Andrés Bello.
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, llamó el sábado a que las elecciones y los festejos posteriores estén marcados por la tranquilidad e iniciar una “gran reconciliación nacional”, según una nota oficial.
El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper, que desplegó una misión de acompañamiento, también instó el sábado a “votar de forma pacífica y masiva”, según un comunicado.
En medio de la veda que rige desde el viernes para la actividad proselitista, algunos mandatarios regionales chavistas inauguran obras públicas, mientras que en las calles de Caracas se sentía poco ambiente electoral.
Maduro tenía previsto reunirse este sábado con líderes internacionales como el expresidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, invitado por el Consejo Nacional Electoral (CNE), y seis expresidentes latinoamericanos liderados por el colombiano Andrés Pastrana, convocados por la MUD.
Antes de dicho encuentro, la canciller Delcy Rodríguez se entrevistó con Pastrana, mientras que el jefe de la campaña chavista, Jorge Rodríguez, criticó a los invitados de la MUD que demandaron “transparencia” en los comicios y los llamó “desempleados”.
“Compartimos divergentes puntos de vista e información”, declaró la canciller.
Advirtiendo que el chavismo ganará la Asamblea “como sea” para “radicalizar” la revolución, Maduro, elegido para el período 2013-2019, asegura que dará una “sorpresa”.
Aunque ha afirmado que en caso de una derrota se lanzaría “a las calles para defender la revolución”, el viernes instó a “convertir las elecciones en una fiesta de convivencia” y reiteró que será “el primero en reconocer los resultados”.
Por años dividida y convencida de un triunfo tras perder 18 de 19 comicios celebrados en la era chavista, la oposición se presenta con una lista única de candidatos y la promesa de un “cambio” que ponga fin a las penurias derivadas de la crisis económica en el país con las mayores reservas petroleras del planeta.
“Tenemos toda la razón del mundo para sentirnos optimistas, pero no debe haber margen para el triunfalismo”, dijo Jesús Torrealba, secretario de la MUD.
Maduro vs Maduro
De ganar una mayoría holgada, la MUD se plantea una amnistía para sus “presos políticos” y reformas económicas, pero también recortar el mandato de Maduro si esas iniciativas son bloqueadas, mediante una enmienda o un referendo revocatorio.
Los ánimos electorales están marcados por la crisis, a raíz del desplome de los precios del crudo en un país que obtiene 96% de sus divisas de las exportaciones del oro negro.
En la última semana, el petróleo venezolano se cotizó en 34,05 dólares por barril, su mínimo en siete años, lejos de los 132 que llegó a alcanzar con el fallecido Chávez, quien apuntaló así una millonaria inversión social y su influencia en la región.
Debido a ello, en Venezuela, altamente dependiente de la importación de alimentos y medicinas, se ha generado una aguda escasez de productos básicos, a lo que se suma una inflación que podría llegar al 200% en 2015, según cálculos privados.
El gobierno atribuye la crisis a una “guerra económica” de la derecha.
Por eso las legislativas se han convertido en un “plebiscito” entre quienes apoyan y quienes están enfadados con Maduro, cuya popularidad, según la firma Datanálisis, cayó al 22%, opina Alarcón.
“Tiene que ver con apoyar o rechazar la gestión, entre electores pro Maduro y contra Maduro”, considera el analista.
El desenlace de las votaciones ha puesto nerviosos a muchos, que recuerdan las protestas contra el gobierno que dejaron 43 muertos entre febrero y mayo de 2014, y a raíz de las cuales fue condenado el líder del ala radical de la oposición, Leopoldo López, a casi 14 años de cárcel.
Algunos se han lanzado incluso a los supermercados a abastecerse.