Las autoridades le instaron a que enterrara los restos de su esposa en 2009, cuando su caso se publicó por primera vez en la prensa, pero no existe ninguna ley que le obligue a hacerlo.
El hombre, residente en la provincia de Quang Nam, durmió al principio en la tumba con el cadáver de su mujer, pero sus hijos lo convencieron para que no pasara las noches en esas condiciones.
Decidió entonces modelar una muñeca de arcilla de tamaño real, con ropa incluida, e introdujo dentro los restos de su esposa fallecida.
El artículo de VietnamNet muestra fotos de Le Van posando con la muñeca junto a su hijo en la entrada de su humilde vivienda y tumbado en la cama.