Charlene Quirk ordenó una pizza grande al restaurante Soprano´s East, ubicado en la 941 Oxford street East, Londres, Inglaterra. La orden llegó a la residencia de Charlene, quien pagó US$37.56 por la orden.
“Me disculpo por las imágenes, pero creo que todos tienen que conocer esta situación”, escribió en su Facebook Charlene. Las fotografías que publicó mostraban un condón usado junto a la orden de compra.
Posted by Charlene Quirk on Monday, 23 May 2016
“Llevé la pizza a la mesa del comedor, comimos y antes de finalizarla, me di cuenta que había algo en la caja, era un preservativo usado”, publicó.
Charlene llamó molesta al restaurante. El dueño del lugar, Hussein Darounparvar, le respondió y escuchó lo que había pasado. Hussein le respondió: “no moleste, guárdelo y úselo”.
Posted by Charlene Quirk on Monday, 23 May 2016
Charlene indignada por la respuesta del dueño del restaurante decidió mandar un correo electrónico a Middlesex Health Unit (Unidad de salud Middlesex) con las imágenes y una denuncia de lo que había pasado.
La historia de Charlene se viralizó en las redes sociales y su publicación cuenta con más de 3 mil compartidos y los usuarios mostraron su repudio hacia el restaurante.
