URBANISMO Y SOCIEDAD

El covid-19 intensificará su efecto en zonas de pobreza

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Según la directora de la OPS, Carissa Etienne: “Muchos países de la región ya han reportado la transmisión del nuevo coronavirus”. El acelerón en el continente fue Estados Unidos, el país del mundo con más infectados. En Latinoamérica, los contagios han aumentado rápidamente del 0.1% del epicentro de la epidemia a casos globales de 2.4% como Italia, España, Irán y Corea del Sur. La pandemia llegó a Guatemala, un país con enormes desigualdades, con el 60% de población en pobreza o extrema pobreza.

' El Gobierno es asesorado por algunos gobiernos de países asiáticos. (Javier Serrano “expatriado de la AACID Centro América”)

Alfonso Yurrita Cuesta

Así las cosas, van a empeorar, según el profesor P. Hunter (U.East Anglia, R.U.), porque EE. UU. está fracasando en la forma de combatir el coronavirus y sospecha que en las próximas semanas la curva de contagios va a crecer con inmigrantes vinculados con EE. UU. No se conoce realmente el alcance de la pandemia en el país, algunos indican que el pico llegará a principios o mediados de mayo y se reconoce que “lo peor está por llegar”.

La pandemia llega al país con muy pocas capacidades de resiliencia ante las crisis en las capas más vulnerables de la población, sobre todo la población rural. Por ahora, hay una evolución lenta de la pandemia, con la mayoría de casos importados, sobre todo de gente que ha estado en Europa y EE. UU. y ha vuelto y está desarrollando la enfermedad o en cuarentena controlada. Aquí se ha iniciado también el contagio comunitario, y actualmente hay ya municipios con un cordón sanitario.

La densidad poblacional no parece jugar a favor en América Latina, en especial países como Guatemala, donde la mayoría de la población es urbana en un 54% y rural en un 46% (P.L.) y solo se sostienen con cajas de comida que reparte el Gobierno. Y crean un fondo llamado “Bono Familia” de Q75 diarios. El dinero empieza a agotarse para miles de comerciantes informales, sin clientes desde el inicio de la cuarentena. La crisis económica podría ensañarse en el comercio formal, 70% de población económicamente activa, 7.1 millones de población económicamente inactiva, con 4.8 millones sin transporte.

Las ventas de comida, de ropa, etc., tomaron un giro, manteniendo abajo sus persianas. Mientras, algunos comercios viven dentro de aglomeraciones, como las empresas de telefonía móvil, donde decenas de guatemaltecos buscan pagar sus facturas. El paseo peatonal de la Sexta mantiene un ritmo constante de transeúntes del sector informal, donde no hay separación entre personas y sin advertencias visibles.

En Guatemala, 287,437 viviendas no cuentan con energía eléctrica. El Censo del 2018 contó 3 millones 215 mil 931 hogares, en que solo el 59 por ciento cuenta con tubería de agua instalada. El 41 por ciento sale de sus casas a buscar y comprar agua; 2.3 millones están dentro de la hambruna; entre mayo y agosto es la primera y segunda siembra de maíz, cuando las familias agotan sus reservas alimentarias, con lo que la desnutrición avanza.

Los mercados son de alta concentración de personas que siguen funcionando con normalidad, 4.88 millones, de los cuales 70.2%, trabajan en el sector informal. Además, el “Min.Trab” registra ya mil 400 despidos durante la emergencia por covid-19. A esto se añade la reducción de las remesas de las que dependen muchas familias que proceden de Estados Unidos, que actualmente es el epicentro mundial de la pandemia. El informe de THCG indica que entre un 20% a un 39% podría ser la baja. Por lo que habrá que organizar el futuro de una nueva sociedad, poscovid-19, que será diferente, donde se deberá estudiar la región, así como el uso del suelo y su movilidad.

ESCRITO POR:

Alfonso Yurrita Cuesta

Arquitecto con estudios de urbanismo en Land Reform Training Institute, Taiwán / Lincoln Institute of Land Policy, Inc., EE. UU. Director de la Unidad Planificación Urbana Municipalidad de Guatemala. Desarrolló el Plan Regulador de Antigua Guatemala.