IMAGEN ES PERCEPCIÓN
Israel en guerra
En la mañana del 7 de octubre, un ataque conjunto por tierra, aire y mar llevado a cabo por el grupo terrorista Hamás fue lanzado desde la Franja de Gaza, tomando por sorpresa a Israel. Familias completas asesinadas; jóvenes aniquilados durante un concierto; 40 bebés masacrados; mujeres ultrajadas, asesinadas y luego exhibidas en la vía pública.
' No se había visto desde el Holocausto un ataque tan atroz e inhumano en contra de Israel.
Brenda Sanchinelli
El gobierno israelí respondió rápidamente a la crisis, y Benjamín Netanyahu declaró la guerra a Hamás, lanzando la operación “Espada de Hierro” sobre Gaza. Pocas horas después, decenas de aviones surcaron los cielos y atacaron la Franja en un intento de destruir objetivos militares. Hasta ahora, 300 mil reservistas israelíes han sido llamados a filas.
Este evento fortaleció la imagen de Netanyahu y ha sido una oportunidad de unidad ante todo los ciudadanos, políticos opositores y conservadores; todo el mundo cerró filas en torno al primer ministro porque ahora se trata de demostrar la unidad de Israel y combatir a los terroristas.
Mientras, la “Operación Diluvio de Al-Aqsa”, lanzada por Hamás, simboliza que esta guerra no lleva 75 años, sino cuatro mil. La mezquita de Al-Aqsa, ubicada en Jerusalén, es el tercer lugar más sagrado para los musulmanes, ya que el Corán señala que desde allí subió a los cielos el profeta Mahoma. Y según la Torá, Abraham, el padre de la fe, ofreció en ese mismo sitio a su hijo Isaac para demostrar su lealtad a Dios. Allí se ubica el Muro des Lamentos.
Aunque el objetivo del ataque declarado por Hamás es la liberación de los lugares sagrados islámicos y la independencia de los territorios palestinos, las verdaderas razones son evidentemente otras. En los últimos años, Irán se había quedado aislado, pero Arabia Saudita estaba en la mesa de negociación con Israel, a punto de firmar importantes acuerdos de paz, un golpe moral brutal contra Irán, no se diga contra la causa Palestina. Riad tiene como objetivo aislar a Teherán e integrar su economía pospetrolera en la región. Aunque todos piden un alto al fuego, después de este ataque todo cambia. ¿Qué país musulmán se va querer sentar con Israel, frente a lo que Palestina está denunciando? Ya Arabia Saudita salió a respaldar a Palestina y a condenar a Israel. Y en Irán el presidente Raisi salió a celebrar ese ataque extremista.
El grupo Hamás tocó a Israel donde más le duele. El país que era un ícono mundial en seguridad fue tomado por sorpresa, falló la legendaria inteligencia israelí, pues no logró detectar este ataque atroz, que llevaba meses planeado. Estaban acostumbrados en Israel a los bombardeos aislados, cohetes que muchas veces eran interceptados. Pero esta vez, en 20 minutos recibieron cinco mil cohetes. Y pusieron en jaque al Domo de Hierro, que esta vez fue rebasado.
Aunque el poderío militar israelí es inmensamente superior al de Palestina, la pregunta es: ¿qué alcance tendrá la respuesta de Israel?, porque no es fácil actuar sabiendo que los rehenes tomados por los extremistas serán utilizados como escudos humanos para tratar de evitar ataques mayores. Hamás ha amenazado con matar a civiles como rehenes y difundir imágenes de la ejecución en internet. Mientras, el ministro de Defensa israelí ordenó cortar en Gaza electricidad, agua, comida y combustible.
La guerra que comenzó el fin de semana en Israel tiene el potencial de desatar un conflicto mundial de grandes dimensiones. Los ciudadanos israelíes jamás se sintieron tan vulnerables e inseguros. La sensación que sienten se compara con el 9-11, en EE. UU., tras la caída de las torres gemelas. Lo que hizo Hamás es un acto terrorista salvaje y condenable, incluso por muchos de los propios musulmanes.