IMAGEN ES PERCEPCIÓN
La piscina de los sueños, una realidad diferente
Hace algunas semanas me contactó un importante artista italiano que radica en New York para expresarme su interés en construir un importante proyecto en Guatemala que podría transformar nuestra imagen país.
' Podría ser un reto para Giammattei, generaría desarrollo y empleos, además de cambiar la imagen país.
Brenda Sanchinelli
Sergio Furnari es un artista siciliano que desde muy niño aprendió técnicas relacionadas con la pintura a mano en cerámica, una técnica única en su género. Toda su vida la ha dedicado a su pasión, esculpir y pintar. Cuando cumplió 20 años hizo sus maletas y se marchó a New York, en busca del sueño americano. Sus primeros años en la Gran Manzana fueron duros, pero finalmente llegó su gran oportunidad, cuando esculpió una de las obras más emblemáticas de New York, Lunchtime on Top of a Skyscraper, recreación de una fotografía tomada en 1932 en Manhattan a un grupo de trabajadores comiendo en un edificio a 800 pies de altura. El artista la realizó en el año 2000 y a partir de esa fecha se volvió muy famoso.
De allí ha tenido la oportunidad de hacer obras de arte para artistas famosos como Celine Dion y Robert de Niro. Su trabajo es altamente reconocido y admirado alrededor del mundo. En 2007 hizo su primer viaje a Guatemala para trabajar en la producción de azulejos pintados a mano con la empresa Samboro y quedó enamorado de nuestro país, al que llama un paraíso. Desde ese día Furnari tiene en su mente el sueño de construir aquí la piscina más grande del mundo, con azulejos pintados a mano.
Su objetivo también es que a través de este sueño se generen nuevas fuentes de empleo para las personas. Dice que en lugar de mandar el talento fuera de Guatemala a sufrir el estigma de la inmigración ilegal, debemos mantenerlos en casa para engrandecer nuestro país y proveerles dignidad de vida. La parte social de este proyecto se llama “Pintando sonrisas”. Y es que, a pesar de toda la riqueza natural del país, existe un alto porcentaje de desempleo. El enfoque principal gira en torno a las habilidades del artista y la generosidad para compartir sus conocimientos con jóvenes de escasos recursos, proporcionándoles, además de empleo, un plan de desarrollo integral. Para este artista, Guatemala tiene el clima y la geografía perfectos para hacer su sueño realidad, porque hay un gran potencial en la mano de obra y gente talentosa. Un megaproyecto como este podría ser complicado para otros, pero para Furnari sería una tarea fácil si las personas adecuadas se involucraran.
Solo necesita un terreno a la orilla del océano Pacífico, inversionistas, mano de obra y mucha buena voluntad para hacer este sueño una realidad. Para muchas personas este gran proyecto podría parecer solo una fantasía, pero ¿qué es la vida sin sueños, ambiciones, arte, amor y pasión? Este proyecto podría poner a Guatemala en el ojo del mundo para algo positivo, innovador, artístico y cambiar nuestra imagen país. Es un privilegio que un artista reconocido a nivel mundial desee realizar un proyecto de esta magnitud en Guatemala. Con la ayuda de Sergio Furnari se impulsaría la mano de obra guatemalteca y se generaría valor y reconocimiento mundial a la misma.
La Piscina de los sueños podría ser un oasis en medio de una pequeña ciudad que atraería turistas de todo el mundo e incluiría apartamentos, hoteles y resorts, tiendas, moda e incluso un lugar de conciertos para superestrellas internacionales. La idea es construir una ciudad autosuficiente que además genere empleos y desarrollo en un área que prácticamente está abandonada por el Estado. Los edificios que rodeen la piscina deben estar certificados por LEED, con fuentes de energía sostenibles y renovables.