ESCENARIO DE VIDA

¿Van de la mano la ciencia, la fe y la ética?

Leí recientemente el libro del Dr. Federico Meléndez, decano de la Facultad de Teología de la Universidad Mariano Gálvez, y en primera instancia me impactó su título: Ciencia y ética en la creación de Dios.

' Marginamos los valores morales llegando a un “vacío ético” que es el trágico suicidio del espíritu.

Vida Amor de Paz

El libro del Dr. Meléndez nos presenta grandes retos para el futuro del planeta. Uno de los temas que enfatiza es el cambio climático, donde habla de que si la humanidad no cambia sus sistemas de producción y el modelo de civilización que hemos creado, el futuro que nos espera no es nada halagüeño ni agradable. Las Naciones Unidas, conscientes de los graves problemas mundiales que la civilización tecnocientífica ha generado en los siglos XX y XXI, alerta a la humanidad sobre las graves consecuencias de los fenómenos climáticos pero lanza un grito de esperanza para que rectifiquemos nuestros caminos.

Meléndez ha indagado minuciosamente sobre diferentes formas de analizar la problemática social y ambiental y cita fuentes nacionales como internacionales para sustentar sus teorías. Una de ellas habla del escándalo ético por parte de la sociedad entera, que muchas veces permanece indiferente, al margen de los problemas de pobreza y desigualdad socioeconómica, sobre todo en el área rural e indígena.

En el capítulo VII habla de que hemos separado la ética de la ciencia y la economía. Los pusimos en mundos diferentes, cada uno con sus propias leyes. Así marginamos los valores morales, llegando a un “vacío ético”, lo que para mí es el trágico suicidio del espíritu.

Meléndez hace mención de que durante la celebración de la Conferencia Internacional Río+20 se dijo que habría una sobrepoblación en el planeta de 9,000 millones de habitantes para el 2050. Nos recordó que una de cada cinco personas (1.400 millones) vive con 1.25 dólares al día o menos, que mil quinientos millones de personas no tienen acceso a la electricidad, que 2,500 millones carecen de un retrete y que casi mil millones de personas pasan hambre cada día. Enfatiza que las emisiones de gases de efecto invernadero siguen aumentando y más de un tercio de las especies conocidas se podrían extinguir si seguimos cruzados de brazos ante el cambio climático.

Hoy comparto con Uds. la visión del Dr. Meléndez, y dice así: “Ciencia, ética y Dios son temas profundamente entrelazados, y hoy exige que tengamos respuestas a sus planteamientos. Aun cuando ahora disponemos de los grandes aportes de la nueva cosmovisión científica y tecnológica, en cuanto al origen del universo y de la vida, los que tenemos una formación religiosa y espiritual nos sentimos profundamente desafiados en cuanto a cómo dialogar entre lo que creemos y la visión que nos aporta la ciencia y la tecnología, a la luz del tema creación y evolución del universo y de la vida”.

Han sido vertiginosos los avances de la ciencia y la tecnología en la sociedad global. Con la tecnología hemos podido prolongar nuestra esperanza de vida, erradicar enfermedades con tratamientos específicos, comunicarnos de forma inmediata, evidenciar crímenes y delitos por medios tecnológicos y llevar a cabo la educación en línea. Aun así, el Dr. Meléndez nos advierte de que el nacimiento de las empresas tecnocientíficas y globales se ha divorciado de los temas éticos y ambientales.

Cualquier página que abro en este libro se vuelve inspiradora, y debiera convertirse en un libro de texto a ser utilizado en cualquier universidad, tanto dentro como fuera de Guatemala. Según parece, la ética tradicional antropocéntrica ha quedado en desuso. Ahora es, pues, el momento de replantearnos si nuestro modelo de civilización nos llevará finalmente a nuestra ruina, o si estamos a tiempo de cambiar de paradigmas para no poner en riesgo el futuro de la humanidad.

ESCRITO POR:

Vida Amor de Paz

Presidenta de la Fundación del Bosque Tropical. Directora general de Planeta Verde Televisión. Presentadora de Los secretos mejor guardados, de Guatevisión. Recorre el mundo filmando en cinco continentes. Es graduada de la Universidad Panamericana, en Periodismo.