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Economía en Guatemala en 2023: Inflación y desaceleración son los desafíos a superar

A nivel global se viven fenómenos económicos inusuales, pero dos de ellos preocupan a la sociedad en general al inicio de este año: desaceleración económica y precios altos.

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Recesión economica en Guatemala

La desaceleración económica y precios altos marcaran la tendencia de la economía global en 2023. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

En el 2023, la combinación de desaceleración económica y los altos niveles inflacionarios nos podría llevar a un potencial escenario de estanflación del que tanto se ha hablado últimamente. Este ha sido un tema de discusión por sus posibles consecuencias: mayor incertidumbre, pérdida de rentabilidad de las empresas, despidos de personal y pérdida del poder adquisitivo.

Adicionalmente, hay que tomar en consideración que en un escenario en donde se conjugan simultáneamente una reducción significativa de la actividad económica con un período inflacionario, las herramientas de política económica utilizadas para contener ambos fenómenos macroeconómicos tienen efectos contrarios.

Es decir, una política expansiva para reactivar la economía puede llegar a ser inflacionaria, mientras que una política restrictiva para contener la inflación probablemente traerá como resultado una contracción en la actividad económica.

Dentro de este contexto, se analiza lo que se podría esperar para el primer trimestre del 2023, para lo cual se exponen algunos indicadores macroeconómicos pasados para comprender cómo estamos hoy.

La inflación continuará

Iniciamos con los datos de la inflación, la cual tiene como consecuencia la pérdida del poder adquisitivo de la población.  Para el período comprendido entre enero de 2010 a febrero de 2022, la inflación interanual medida de forma mensual fue en promedio 3.97%. A partir de marzo comenzó a subir más allá de ese valor, de tal forma que a noviembre se ubicó en 9.17%, aunque no había sido mayor a 6% desde diciembre de 2011.

Ante esta situación, la Junta Monetaria (JM) ha incrementado la tasa de interés líder a lo largo de 2022 pasando de 1.75% en abril a 3.75% en noviembre.  A pesar de que hubo una reducción de la inflación entre octubre y noviembre pasando de 9.70% a 9.17% ésta aún se ubica por encima del promedio (3.97%) y de la meta del Banco de Guatemala (Banguat) de 4% anual.

Esto lleva a pensar que los incrementos en la tasa de interés líder podrían continuar a menos que la inflación disminuya dramáticamente en el futuro próximo.  De hecho, el Banguat proyecta un ritmo inflacionario de 5% a diciembre de 2023.

Poco crecimiento

Por otro lado, en promedio, el producto interno bruto (PIB) trimestral interanual creció entre 2014 y 2022 un 3.56% en términos reales.  Tuvo una caída máxima de -8.78% en el segundo trimestre de 2020 consecuencia del cierre del país por la pandemia y un crecimiento máximo de 15.44% en el segundo trimestre de 2021 causado principalmente por el regreso a la normalidad.

Dejando por un lado los datos provocados por la pandemia, el promedio de este indicador para el período comprendido entre el 2014 y el 2019, fue de 3.62% anual mientras que el promedio anual entre el último trimestre de 2021 y el segundo trimestre de 2022 fue de 4.44%, para una reducción del mismo en los últimos 3 trimestres pasando de 4.7% a 4.5% y a 4.1%.

Adicionalmente, es importante tomar en consideración que Estados Unidos de Norteamérica es el principal destino de las exportaciones de Guatemala.  Derivado de ello, es lógico pensar que hay una relación entre el comportamiento de ambas economías.  De hecho, el comportamiento de las tasas de variación interanual del PIB, medida de forma trimestral, en términos reales de ambos países tiene un comportamiento muy similar.

Al realizar un análisis de regresión entre los datos de la variación interanual del PIB de Guatemala y los datos de la misma variable, pero de EE. UU., para el período comprendido entre enero de 2014 y el segundo trimestre de 2022, se concluye, con un nivel de confianza del 97.2%, que existe una relación directa entre ambos conjuntos de datos.

Por supuesto, esto no quiere decir que nuestra economía depende exclusivamente del comportamiento de la economía de nuestro socio más importante, pero nos da indicios de qué es lo que podría pasar en un futuro próximo tomando en cuenta dicha relación.

Es de hacer notar que, al hacer la regresión, se concluye también que las variaciones en el PIB guatemalteco son menores que las del PIB de Estados Unidos, puesto que tienen una relación de 1 a 0.15 (una caída de un 1% del PIB en EE. UU., podría resultar en una caída de 0.15% del PIB de Guatemala). Dicho en otras palabras, nuestra economía es resiliente ante cambios producidos en la economía de Estados Unidos.

 

Posible recesión

Distintos modelos econométricos, como por ejemplo el de Bloomberg, y lo manifestado por distintos tanques de pensamiento, como por ejemplo el Conference Board, Inc., pronostican que la economía estadounidense tenderá a debilitarse enfrentando una posible recesión en 2023.

Estas perspectivas están asociadas con los niveles inflacionarios de EE. UU., y a la actitud agresiva que ha tomado la Reserva Federal (Fed) al respecto, al incrementar la tasa de interés de referencia.

Ante esto, podemos prever que el foco de la Fed seguirá siendo la reducción de la inflación, aunque esto pueda tener una repercusión negativa en la actividad económica estadounidense al continuar incrementado la tasa de interés.

A pesar de que localmente también se ha dado un incremento sostenido en las tasas de interés de parte de la Junta Monetaria (JM), se concluye que nuestra economía ha sido estable a lo largo de los últimos años y que es resiliente a cambios en la economía estadounidense por lo que podríamos esperar que el primer trimestre de 2023 ésta siga creciendo, muy probablemente, a un ritmo lento y esto, a pesar de que aún se presentarán niveles inflacionarios más altos de lo que hemos tenido en el pasado.

Debemos permanecer atentos a lo que suceda globalmente en los próximos 90 días, ya que todo puede cambiar rápidamente y será importante analizar de nuevo los datos más recientes para entender los escenarios más probables que pueden esperarse para el segundo semestre del próximo año.