Diversos sectores empresariales, de sociedad civil, academia y religiosos han cuestionado en las últimas semanas al TSE ya que los eventos no se han publicado en Guatecompras sino hasta que ya fueron adjudicados. Además, se hacen de forma directa, sin cumplir con las modalidades ordinarias de licitación o cotización.
En entrevista con Prensa Libre, la presidenta del TSE, Irma Palencia, defiende la legalidad de estas adquisiciones. Asegura que se hicieron -y se continuarán haciendo- de forma directa porque hay desabastecimiento en los mercados y el tiempo no es suficiente para lanzar licitaciones o cotizaciones.
A la fecha hay 54 compras directas por excepción que suman Q15.4 millones. ¿Cómo justifica la necesidad de estas adjudicaciones?
El año pasado, cuando hicimos la presentación del presupuesto ante la Comisión de Finanzas y Moneda del Congreso, les planteamos una gran preocupación y era que derivado de la pandemia los proveedores ya no estaban haciendo entregas en tiempo normal porque no estaban abastecidos. Nos preocupaba que, hasta enero o febrero del año próximo, como es usual, nos dieran el presupuesto electoral porque en junio son las elecciones.
Derivado de eso, presentamos dos solicitudes de presupuesto, el de funcionamiento y el preelectoral. Nunca en la historia del tribunal le habían dado un presupuesto preelectoral como anticipo, pero dado lo que estoy mencionando el Congreso nos dio un anticipo con cargo a las elecciones 2023 de Q500millones.
En aras de la transparencia, generamos el acuerdo 121-2022 donde creamos los mismos procedimientos que están en la Ley de Contrataciones, pero con plazos más reducidos. Aun así, demoramos 64 días hábiles (en culminar los procesos de compra), entonces hubo atrasos en la ejecución y en julio no habíamos ejecutado casi nada. Entonces modificamos ese acuerdo y generamos el 386-2022, que acortaba aún más las mismas etapas.
Tenemos en cola más de 46 procesos de compra que están en gestión, pero tienen que cumplir todos los pasos que nosotros mismos nos impusimos.
Aunque a usted le parezca que son 10 y no sé cuántos millones, no es nada comparado con todo lo que necesitamos. Pareciera que adrede nos complicamos la vida, pero es por transparentar los procesos. La sociedad civil piensa que lo estamos haciendo mal y resulta que los estamos haciendo súper bien.
Varios de estos problemas que usted menciona se pudieron solventar con planificación. ¿Por qué no se previó, desde un inicio, lanzar licitaciones y cotizaciones que hubiesen sido más transparentes?
Primero, porque si era presupuesto extraordinario, tenían que ser procesos por excepción. ¿Y sabe por qué otra cosa? Porque por vez primera, de manera obligatoria, Segeplan nos pasó a una ejecución por resultados para la que no estábamos preparados. Nosotros debemos tener códigos de insumo, así lo que queramos comprar sea un lapicero. Hay un catálogo que tiene finanzas, pero no tiene todo. La creación del código de insumos se tarda, aproximadamente, un mes.
El modelo electoral tecnológico empezó a gestarse en junio del año 21 y se aprobó en enero de este año derivado de la observación electoral en distintos países. La gente piensa que por qué salió ahorita, pero tuvo su etapa de maduración.
Hablemos de transparencia. Uno de los factores que más suspicacias genera es que estas compras directas por excepción no se han publicado en Guatecompras, sino hasta que ya están las adjudicaciones ¿por qué?
Hay un artículo de ley que dice que los procesos por excepción se pueden publicar al final, o sea, uno decide. Es la circular 1-2022 de la Dirección General de Adquisiciones del Estado, artículo 13, literal b). Todo está en ley, no es una ocurrencia del TSE.
Pero estamos hablando de compras millonarias. Pareciera que el tribunal se limitó a cumplir los requisitos mínimos que exige la ley. ¿Por qué no publicaron estos eventos en Guatecompras en pro de la transparencia, considerando la magnitud de estos?
Si lo ponemos desde el principio en Guatecompras nos tenemos que sujetar a los plazos de Guatecompras. Y estamos por excepción. Nosotros mismos estaríamos saliéndonos del procedimiento por excepción, así que por eso es por lo que no es viable.
Recientemente, el TSE adquirió camionetas Toyota Prado para los magistrados, ¿no contradice esta adquisición principios de austeridad?
La flotilla de vehículos que encontramos aquí en el Tribunal está rebasada. Hay vehículos que, si yo le contara las historias, dan risa o no sé si dan ganas de llorar. Ahorita van a salir grupos a empadronar el fin de semana empujando los carros, sacando humo. Fuimos a hacer una jornada a Retalhuleu y tuvimos que pagar grúa porque ya no se pudieron mover. Entonces era necesario comprar una flotilla de vehículos. Los vehículos no son para los magistrados, yo no me lo llevaré a mi casa el día que me vaya. Y ya me queda casi la mitad de mi período. Son para el tribunal.
Cuando vemos a las organizaciones que expresaron su preocupación por las compras que el tribunal hizo en los últimos días, vemos que son diversas. Hay sectores académicos, empresariales, sociedad civil y religiosos. Ante esto, hay algo que queda claro y es que la comunicación y transparencia no ha sido suficiente. ¿Cómo enmendarán esto?
Creo que la transparencia es la adecuada, pero lo que ha faltado es que la conocieran. Asumimos la responsabilidad de que tenemos muchas deficiencias en comunicar por la desarticulación de nuestro departamento de comunicación. Y como no comunicamos, cualquier noticia que medio pescan, oyen o que alguien filtra de mala fe se tergiversas sin conocer el por qué.
Entonces, no, yo creo que los esfuerzos de transparencia son los adecuados. Lo que ha faltado, y lo acepto, es comunicarnos adecuada y oportunamente. Transparencia sin comunicación es como tener una lámpara debajo de la mesa, entonces siempre está oscuro. Pero esperamos ya despejar las dudas de todos estos sectores, con los que ya tendremos una cita.
Se ha generado un desgaste en la imagen del Tribunal en estas últimas semanas derivado de las compras por excepción. Esto puede generar consecuencias de cara al proceso electoral, ¿cómo piensan revertirlo?
Teniendo un robusto departamento de comunicación social. Como se hizo una reingeniería, va a tener otra tónica de trabajo, tenemos políticas de comunicación ya diseñadas. Tenemos proyectos para un posicionamiento institucional y esperamos que próximamente se puedan echar a andar.
