¿Cómo fueron los inicios de la empresa que dirige?
La idea de crear Homeland nació en el 2002. Decidí invitar a varios amigos que tenían las cualidades necesarias para cada área de la empresa y ahora son mis socios: Alejandro Gudiel, Estuardo Taracena, Francisco Marcucci y Carlos Armando Tello.
La empresa arrancó formalmente en el 2003, cuando todavía era estudiante de Ingeniería en Electrónica, en la Universidad Francisco Marroquín. La idea fue formar una compañía digital que hiciera comunidades en línea a nivel laboral, ya que entendíamos que internet, en esa época, funcionaba solamente para buscar información, pero nosotros queríamos hacer más con un portal, como instalar softwares o aplicaciones, que ahora se conoce como cloud computer o computación en la nube.
¿Por qué decidieron desarrollar un software para establecimientos educativos?
La idea surgió porque nos solicitaron un programa que pudiera generar tráfico en el sitio de un colegio. Se me ocurrió que podíamos hacer algo enfocado a padres de familias, catedráticos y estudiantes. Así nació la plataforma Cole 24/7.
¿Qué funciones ofrece ese sistema?
Permite hacer solicitudes para que ingrese un estudiante al colegio, y facilita el proceso de admisión e inscripción. También se pueden efectuar tareas en línea, notificar ausencias y hacer citas para los padres de familia. Mejora la comunicación interna de actividades a través de circulares, galerías de fotografías, y brinda herramientas para pagar colegiatura y matricula a través de banca en línea.
¿Qué resultados positivos se han visto con Cole 24/7?
En 10 años no hemos perdido ningún cliente, lo cual refleja que nuestros servicios funcionan bien.
Según estadísticas propias, Cole 24/7 ayuda a mejorar hasta un 20 por ciento el rendimiento académico de los estudiantes, debido a que los padres y maestros supervisan punteos y actividades que se deben ejecutar en la plataforma. Hay un compromiso mayor por parte del estudiante.
Actualmente, nuestro software lo solicitan varios ministerios de Educación de otros países, y universidades privadas de mucho prestigio.
Fuente: Juan Carlos Rodríguez, jcrodriguez@homeland.com.gt