La Universidad del Estado de Georgia, en Estados Unidos, informó que se trata de “una forma casi circular, con una atmósfera libre de polvo y con áreas complejas de material que se mueve, conocido como células convectivas o gránulos”.
BBC NEWS MUNDO
La estrella gigante que te permite ver en qué se convertirá el Sol al final de su vida en 5.000 millones de años
Un equipo internacional de astrónomos produjo las primeras imágenes detalladas de la superficie de una estrella gigante afuera del sistema solar, las cuales cree que revela cómo será el Sol en el futuro.
El nombre de la estrella es π1Gruis y fue observada, por primera vez de forma directa, gracias al Very Large Telescope del Observatorio Europeo Austral (ESO, por sus siglas en inglés: European Southern Observatory), ubicado en Chile.
“Una estrella evolucionada en la última fase principal de vida, π1Gruis es 350 veces más grande que el Sol y se asemeja a lo que nuestro Sol se convertirá al final de su vida en 5.000 millones de años”, señala la universidad en un comunicado.
“Estudiar esta estrella le da a los científicos una idea sobre la actividad, las características y la apariencia del Sol en el futuro”.
Cuando el Sol se hinche
Los hallazgos del grupo de astrónomos, liderados por la investigadora del ESO Claudia Paladini, fueron publicados en la revista especializada Nature.
De acuerdo con ESO, que es la principal organización intergubernamental dedicada a la astronomía, “en unos 5.000 millones de años, nuestro Sol se hinchará para convertirse en una estrella gigante roja similar”.
π1Gruis se encuentra en la constelación de Grus y está situada a 530 años de luz de la Tierra.
Además tiene una característica muy peculiar, es: “varios miles de veces más brillante” que el Sol.
“Esta es la primera vez que tenemos una imagen inequívoca con ese nivel de detalle de una estrella gigante como esta”, señaló Fabien Baron, uno de los autores del estudio y profesor asistente en el Departamento de Física y Astronomía de la Universidad del Estado de Georgia.
Vista en Chile
La imagen se obtuvo gracias al instrumento Pionier —el cual está conformado por cuatro telescopios— que SEO tiene en su observatorio en Chile.
“La razón es que hay un límite en los detalles que podemos ver en función del tamaño del telescopio utilizado para las observaciones. Para este estudio, usamos un interferómetro. La luz de varios telescopios se combinó para superar las limitaciones de cada telescopio, logrando así una resolución equivalente a la de un telescopio mucho más grande”, indicó el investigador.
La universidad señaló que, tras observar la estrella con Pionier, en Chile en septiembre de 2014, Baron “usó datos interferométricos, un software de reconstrucción de imágenes y algoritmos para componer imágenes de la superficie de la estrella”.
La trascendencia
ESO explicó que los investigadores descubrieron que “esta gigante roja tiene unas pocas células convectivas o gránulos, y que uno de ellos tiene un tamaño de unos 120 millones de kilómetros (alrededor de un cuarto del diámetro de la estrella)”.
Lo peculiar de esta “estrella anciana”, como la califica la organización conformada por 16 países, es que el polvo a su alrededor no impide apreciarla.
“Cuando observamos las superficies —conocidas como fotosferas— de muchas estrellas gigantes, las vemos oscurecidas por el polvo, lo cual dificulta las observaciones. Sin embargo, en el caso de π1Gruis, aunque hay polvo lejos de la estrella, su presencia no tiene un efecto significativo en las nuevas observaciones infrarrojas”, indicó ESO.
“Cuando, hace mucho tiempo, π1 Gruis se quedó sin hidrógeno para quemar, esta anciana estrella dejó atrás la primera etapa de su programa de fusión nuclear. Se contrajo a medida que se quedaba sin combustible, haciendo que la temperatura aumentara más de 100 millones de grados”.
Esas temperaturas extremadamente altas hicieron que su núcleo se calentara intensamente y expulsara sus capas externas “haciendo que creciera hasta un tamaño cientos de veces más grande que su tamaño original”.
“Hasta ahora, nunca se habían obtenido imágenes detalladas de la superficie de una de estas estrellas”, indicó ESO.