Escenario
Familia de Quetzaltenango gana el Concurso de Nacimientos 2025 de Prensa Libre; estos son los tres belenes premiados
Agradecer por las bendiciones recibidas y honrar la memoria de las generaciones, representa los ganadores del concurso de nacimientos de Prensa Libre.
La familia Mazariegos Hernández, originarios de Quetzaltenango, tienen su misterio conformado por San José, la Virgen María y el Niño Jesús desde hace 50 años. (Foto Prensa Libre: Érick Ávila)
“El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros” es el pasaje 1,14 del evangelio de Juan, el cual recuerda que Jesucristo es la Palabra eterna de Dios, y se hizo hombre para vivir entre la humanidad y cumplir el propósito de salvación.
Prensa Libre convoca cada año a la población guatemalteca a participar en el concurso de escenas de la Natividad durante la primera semana de diciembre. En esta edición, 127 pesebres fueron inscritos en la plataforma digital, donde los participantes enviaron fotografías y explicaciones del significado de sus obras. Entre ellos, los editores de este matutino escogieron cinco finalistas. Luego, los lectores votaron en línea por su favorito, y el primer lugar fue para la familia Mazariegos Hernández, de la zona 9 de Quetzaltenango.
Primer lugar: familia Mazariegos Hernández
Alma Hernández recuerda que su madrina, Concepción Martínez, le regaló un misterio, formado por San José, la Virgen María y el Niño Jesús cuando tenía 1 año. A la fecha, lleva 50 años en la familia.
El belén mide aproximadamente tres metros de fondo por cinco de largo, y ha ido creciendo con los años. Lo complementa con piezas como el Padre Eterno, los Reyes Magos, pastores, ovejas y elementos que se encuentran en los mercados navideños de Xela. Este año, le tomó a la familia tres semanas elaborarlo, e incursionó en el uso de tecnología al montar un río con peces reales, una chimenea que acoge al Niño Jesús y una conexión eléctrica de luces combinada con tela.

Para la familia Mazariegos Hernández, todos los días se celebra la vida de Jesús y agradecen las bendiciones recibidas. (Foto Prensa Libre: Érick Ávila)
Devoción
A lo largo de cuatro generaciones, este núcleo familiar ha conservado la tradición de representar el nacimiento de Jesús. Cristhian Mazariegos destaca que elaborarla es una forma de agradecer a Dios por las bendiciones recibidas durante el año, además de fomentar la cercanía entre los integrantes, pues grandes y pequeños se involucran en distintas actividades.
En el pesebre se lee: “Un niño para el hombre más bajo y el rey más alto”, frase tomada de la película Jesús, El nacimiento. Para la familia altense, representa cómo la majestad de Dios hecho hombre decide descender a un lugar humilde y hacerse presente para convivir entre los seres humanos, si se toma en cuenta que es el Creador del universo, rodeado de sus padres terrenales y de los animales del establo.
Homenaje familiar
A través del portal de Belén, Cristhian busca honrar la memoria de su padre, Maynor Mazariegos, así como la de sus abuelos, Flor de León, Juan José Hernández y Amanda Rodríguez, de quienes heredó la tradición.
La familia Mazariegos Hernández afirma que no debe olvidarse el verdadero significado de la Navidad: celebrar la vida de Jesús cada día, hacer que el Niño Dios no solo figure en el nacimiento, sino que viva en cada corazón y que nuestros actos reflejen su mensaje de amor. Además, debe fortalecerse la unión familiar y valorar cada muestra de afecto en esta época.

El nacimiento de la familia Mazariegos Hernández es el ganador del primer lugar, el cual simboliza la majestad De Dios hecho hombre naciendo en un lugar humilde. (Foto Prensa Libre: Érick Ávila)
Segundo lugar: familia Hernández Ramírez
Durante siete años, la familia Hernández Ramírez ha participado en el concurso de Prensa Libre y, en cada edición, ha aprendido técnicas para mejorar sus nacimientos. Este año, obtuvo el segundo lugar.
Pablo Hernández, de 49 años, cuenta cómo su tío Juan Hernández y su abuelo Pedro Hernández le transmitieron la tradición de realizar nacimientos. Ahora, él busca heredarla a su sobrina María José, con lo cual suman ya cuatro generaciones impactadas.

La familia Hernández Ramírez busca conservar elementos clásicos e integrar tecnología actual en su nacimiento, ganadores del segundo lugar. (Foto Prensa Libre: Érick Ávila)
Tecnología
La familia Hernández se reunió para hacer bocetos y tomar la decisión final del belén de tres metros. Lo elaboraron todos los fines de semana durante tres meses, y decidieron incorporar toques tecnológicos.
Hernández es ingeniero en sistemas y aficionado a la electrónica, por lo que integró en la iluminación tiras led y bombillas de teatro controladas por microcontroladores Arduino, para programar con efectos las distintas fases del día, junto con villancicos navideños, estrellas, constelaciones, humo en fogatas y un río con piedras. El costo del montaje fue de aproximadamente Q5 mil.
Simbología
En el nacimiento se observa un rebaño de más de 170 ovejas en dirección hacia el Misterio. La familia Hernández Ramírez explica que no tiene un pastor, porque desean representar que el Niño Dios es a quien se debe buscar y seguir en todas las etapas de la vida. El Misterio —formado por San José, la Virgen María y el niño Jesús— lleva 10 años en la familia Hernández.
En el nacimiento aparecen en un establo humilde que les llevó un día de elaboración, con especial atención en sombras, iluminación y detalles, para lograr el mayor realismo posible.
Los ganadores del segundo lugar invitan a vivir la época navideña en el corazón, realizar buenas obras, olvidar rencores, vivir en paz, disfrutar de la familia y aportar al desarrollo del país.

Tercer lugar: familia Zepeda
Desde los ocho años, Gustavo Zepeda, de 31 años, ganador del tercer lugar de este concurso, recuerda cómo se involucraba en la elaboración de nacimientos, tradición heredada de sus padrinos Juan Hernández y Zoila Zúñiga.
Zepeda fue monaguillo, y cuenta que un ministro extraordinario del templo La Recolección observó cómo elaboraba con creatividad los nacimientos. En el 2009, le regaló una Sagrada Familia que tenía 15 años de antigüedad, y decidió restaurarla para recuperar las facciones de la Santísima Virgen y San José..

La familia Zepeda representa en su nacimiento de media vara la apoteosis de la natividad de Cristo, obteniendo el tercer lugar de este concurso. (Foto Prensa Libre: Érick Ávila)
Elaboración
La familia Zepeda elaboró su nacimiento durante 30 días, con elementos tradicionales guatemaltecos de la época, entre ellos musgo, pashte, manzanilla, gallitos y pino. Esto se combinó con técnicas modernas de montaje e iluminación.
La escena representa la adoración de los Reyes Magos y la representación gloriosa de la Natividad de Jesucristo, en un Belén de “media vara” —medida de longitud que va de 384 a 456 mm—, una tradición local donde se incluye una figura del niño Jesús de tamaño mediano, costumbre popularizada por el Hermano Pedro.
En el pesebre se observa cómo la Virgen María porta un ajuar de color rosado y celeste, simbolizando el amor maternal que tiene por el Niño Dios y que acoge a los cristianos. También se destaca la acción paternal de San José al cuidar el espacio humilde, alumbrándolo con un farol.
Tradición
La elaboración de belenes es una tradición que Zepeda ha recibido por más de tres generaciones y que busca heredar, con respeto, creatividad, fe y amor, a su hijo José Ignacio, de 3 años.
El ganador del tercer lugar invita a no olvidar el propósito principal de la época: el nacimiento del Niño Dios, confiar en Él y en su amor. Desea paz en cada hogar y en el pueblo guatemalteco.


