Las jornadas de protestas que se repiten en el país desde hace un mes se colaron en la inauguración oficial de la feria, encabezada por el vicepresidente, Jorge Arreaza.
“Por ahí andan pequeños focos violentos, les cambiamos sus bombas molotov y sus piedras por un libro, vengan para acá a leer. Los chavistas, los no chavistas, aquí está la Feria del Libro”, dijo Arreaza, secundado por el embajador de Brasil en Venezuela, Ruy Pereira, y por el ministro de Educación y vicepresidente del rea Social, Héctor Rodríguez.
Rodríguez destacó el legado en materia cultural dejado por el fallecido presidente Hugo Chávez y sostuvo que la celebración de este tipo de eventos “ha hecho posible que hoy en Venezuela a pesar de la provocación la mayoría queramos la paz”.
La feria tiene como escritor homenajeado al poeta y ensayista venezolano César Chirinos, autor de obras como “Si muero en la carretera no me pongan flores”, y cuenta con más de 140 expositores y unas 400 actividades.
Entre los expositores, destaca el puesto de Brasil, que ha traído a la feria “una tonelada de libros” y plantea como uno de los ejes temáticos la literatura indígena, según dijo el embajador Pereira.
La feria incluye presentaciones de libros, conferencias, tertulias, talleres, cine y una programación especial para los niños.