De acuerdo con el portal de noticias de Alabama al.com, del que se han hecho eco otros medios estadounidenses, el fallecimiento de la ganadora del premio Pulitzer de 1961 en ficción por Matar a un ruiseñor fue confirmada por diversas fuentes de Monroeville.
La autora había sufrido una apoplejía en 2007 y desde entonces atravesaba graves problemas de salud.
El deceso de la autora fue confirmado por la editorial HarperCollins al diario The New York Times, aunque sin dar a conocer detalles.