Existen reglas fáciles de aprender y seguir para el cuidado, mantenimiento y resguardo de la joyería que todas las mujeres debería de saber para sus accesorios siempre luzcan como nuevos.

Regla 1: suavidad en los empaques

Evite las cajas de madera o de plástico duro. Un joyero con forro de terciopelo es ideal, pero, alternativamente, un tejido suave y consistente que cubra el recipiente o pequeñas bolsas de tela estarán bien. Las joyas de plata por ejemplo, puede guardarlas envueltas en paños de algodón.

Regla 2: espacio suficiente

Guardarlas no significa meterlo todo en una caja, lo ideal es que cada joya tenga su propio espacio separado. Las joyas no deben tocarse entre sí porque se rayan. Por eso los joyeros divididos en compartimentos individuales son los más recomendables.

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Regla 3: clima y luz

Los climas extremos, demasiado fríos o calientes, luz solar directa, tampoco se recomiendan. La oxidación o la decoloración son daños causados ​​por condiciones ambientales. Utilizar bolsitas de las que traen algunos artículos electrónicos para absorber la humedad, también funciona muy bien.

Regla 4: la limpieza

Las manos, el cuello, la piel en general transmiten grasa y sudor a la joyería que a largo plazo van acumulando suciedad y mal olor en las piezas por lo que es recomendable limpiarlas antes de guardarlas. Esto se puede hacer con un paño de tela y líquidos especiales que se pueden adquirir en joyerías. Las joyas de oro o plata es recomendable mandarlas a limpiar con un joyero cada cierto tiempo (depende de la frecuencia de uso).

Regla 5:  colgar los collares y cadenas

La mejor manera de guardar collares y cadenas es colgados, esto evitará roces con otras piezas y enredos, incluso entre sí mismas. Es importante tomar en cuenta que deben colgarse individualmente y no todos en el mismo gancho. Además, es indispensable abrochar los cierres antes de guardarlos.

Regla 6: piedras separadas

Los diamantes o zafiros por ejemplo, son piedras muy duras que sin querer pueden dañar otras piedras, por eso lo mejor es que si tiene piezas que contengan este tipo de piedras se guarden individualmente.

Regla 7: cremas, cosméticos y productos de limpieza

Ponerse las joyas DESPUÉS de usar productos de estética para evitar en la medida de lo posible que entren en contacto con productos en espray, perfumes, cosméticos o cremas que puedan dejar residuos o crear abrasiones. No utilizar productos de limpieza con las joyas puestas, estos productos tienen químicos que pueden dañar el brillo e integridad de los metales y piedras.

Regla 8: mar y piscina

Las joyas y el mar/las piscinas no se llevan bien. La sal y el cloro pueden dañar de manera irreversible el color de los metales y diamantes.

Regla 9: deporte

A la hora de practicar deportes, lo mejor es hacerlo sin joyas. El sudor es ácido y puede dañar los metales. Además, al no utilizarlas se evitarán golpes que dañen el metal o debiliten los engastes.

Regla 10: uso frecuente

El proceso de oxidación se ralentiza con el uso frecuente de las joyas. Lo es recomendable es usarlas con frecuencia.

Fuentes: Vicente Amilcar Fernández, Joyero, Joyería Ópalos, teléfono 4847 8220. https://www.argyor.com/ https://nuevalineajoyas.com/ https://lavanijewels.com/