Salud y Familia

Dolor de oído en niños: causas más comunes, cuándo es una infección y cómo quitar esta molestia

Entre las causas más comunes del dolor de oído en niños está una infección y tener cerumen atascado. Saber qué hacer ante esta molestia es importante para no lastimar el tímpano.

Dolor de oído en niños

El dolor de oído en niños puede ser causado por una infección o por tener agua dentro. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

El dolor de oído es una de las molestias más frecuentes que sufren los niños. Las causas pueden ser variadas, desde una lesión, tener líquido en el oído después de estar en las piscinas, hasta sufrir una infección. El tratamiento dependerá de qué origine esta molestia, así como de otros síntomas que tenga el menor de edad.

El oído está dividido principalmente en tres partes: oído externo, medio e interno. Las ondas sonoras entran por el oído externo y llegan al oído medio, en donde hacen vibrar el tímpano.

Estas vibraciones se transmiten a través de los osículos, que son tres huesos pequeños que se encuentran en el oído medio. Luego, las vibraciones viajan hacia el oído interno, un órgano curvilíneo con forma de serpiente y el encargado de transmitir los impulsos nerviosos hasta el cerebro en dónde se identifican como sonidos.

“El dolor de oído suele ser punzante y agudo, otras veces se siente como una presión desde lo interno que podría provocar la sensación de oído tapado. Cuando el niño sienta dolor indicará con palabras su molestia, pero si todavía no habla, entonces lo manifestará por medio del llanto, fiebre o problemas para dormir”, indica el pediatra Pablo Cruz.

Causas del dolor de oído en niños

Las causas del dolor de oído en los niños son variadas y parecidas a los de los adultos. Entre las más comunes se encuentran:

Tener agua en el oído

Después de estar en la piscina o de tomar una ducha puede quedar agua en el oído, esto podría sentirse como si el oído estuviera tapado o escuchar el líquido dentro. A veces la molestia no se presentará de inmediato, sino que a los días se tendrá picazón, dolor, pérdida de audición e incluso fiebre.

Cera del oído atascada

El cerumen o la cera de oído sirve como revestimiento a prueba de agua del conducto auditivo. Es decir, que protege a este órgano y al tímpano de los microorganismos que pueden provocar infecciones, dice Alejandro Lemus, otorrinolaringólogo. Además, ayuda a captar la suciedad que entra al oído y que podría dañar al tímpano.

En caso de que el niño se queje de dolor de oído y al revisarlo nota que tiene cera, entonces puede usar un paño húmedo con agua tibia y pasarlo por el exterior de la oreja. Lemus enfatiza en que no se debe utilizar un hisopo u otro instrumento que ingrese al oído ya que podría dañarlo.

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Un objeto atascado en el oído

Los niños más pequeños suelen meterse a la boca y a los oídos cualquier objeto que encuentren. En caso de que esto suceda en el oído es importante guardar la calma y tratar de extraer el objeto lo más despacio posible.

En caso de que no pueda, lo mejor es llevar al menor de edad a un médico para evitar que se lastime el oído o el tímpano.

Dolor de oído en niños
Un niño pequeño que no sabe hablar y tiene dolor de oído suele llorar y tocarse las orejas. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

Síntomas de gripe

El dolor de oído o la sensación de que un líquido se mueve adentro se considera síntomas de gripe, acompañados de malestar general y congestión nasal. También se puede presentar zumbidos y escuchar como si algo se destapara dentro del oído.

Infección de oído

Las infecciones de oído son más comunes en los niños menores de tres años. De acuerdo con Lemus, tres de cada cuatro niños de esta edad sufren de esta enfermedad.

Este tipo de infecciones suelen presentarse como inflamación del oído medio, causar dolor, picazón y la sensación de oído tapado.

¿Cuándo es una infección de oído?

“Las infecciones de oído son causadas, en su mayoría, por virus o bacterias que llegan al tímpano. En los niños, lo que ocurre es que este espacio que está detrás del tímpano se llena de pus el cual hace presión y provoca dolor”, explica el pediatra.

En caso de que sea una infección, los niños se quejarán de tener dolor fuerte. En caso de que todavía no hablen, entonces podrían manifestar el dolor llorando, estar inquietos, tocarse la oreja en repetidas ocasiones, incluso, jalársela.

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También pueden presentar fiebre, problemas para comer, beber y dormir. Comenzar a llorar cuando se les acuesta, al masticar o succionar, ya que estos movimientos provocan más presión en el tímpano y por ello, más dolor.

Las infecciones de oído en los niños pueden ser causadas por una gripe, infección de garganta o alergias, ya que suelen inflamar las trompas de Eustaquio que se encargan de conectar el oído medio con la garganta.

Cómo se quita el dolor de oído en niños

Cuando se tiene fuerte dolor de oído se puede utilizar analgésicos de venta libre como paracetamol o ibuprofeno. Para los niños se recomienda seguir las indicaciones del prospecto. Recuerdo que los menores de 6 meses no pueden tomar ibuprofeno.

Cómo quitar el dolor de oído en niños
Evite que los niños se hagan presión en el oído que tengan dolor. Procure que duerman del lado contrario, para evitar que se lastimen. (Foto Prensa Libre: etut Subiyanto en pexels.com).

En caso de que el niño presente problemas para tomar líquidos, vómitos, sangre o pus en el oído debe llevarlo al médico lo más pronto posible. También si el oído está hinchado o enrojecido, si presenta fiebre, dolor de cabeza o cuello.

También se recomienda:

  • Compresas frías o tibias: debido a que muchas veces el dolor es por inflamación, se recomienda colocar compresas frías o tibias para disminuir la molestia. Lo ideal es colocar una bolsa de hielo o una manta mojada con agua tibia sobre el oído (sin que ingrese el líquido) y alternar entre tibio y frío cada 10 minutos.
  • No hacer presión: procure no dormir del lado en que se encuentra el oído afectado, ni estarlo tocando.
  • Ejercicios para el cuello: cuando el dolor es por presión en el canal auditivo, se recomienda hacer ejercicios para el cuello. Lo ideal es rotar el cuello y la cabeza lentamente hasta que esté paralela al hombro, regrese su vista al frente y rote hacia el otro lado.

ESCRITO POR:

Andrea Jumique Castillo

Periodista de Prensa Libre especializada en temas de salud, bienestar y cultura, con 5 años de experiencia.