Desde la salida en el 2003 de la primera versión del título, este ha sido un gran éxito comercial con 100 millones de unidades vendidas, por un valor de miles de millones de dólares.
Los estudios Sledgehammer han modificado la mecánica del juego, dotando a los soldados de “trajes de exoesqueletos” que les confieren superpoderes.
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Por otro lado, los movimientos y expresiones de Spacey fueron captados a través de un procedimiento especial para crear una versión virtual realista del actor que interpreta a Jonathan Irons, un mercenario que quiere dirigir el mundo
Trailer del videojuego (Video Prensa Libre: YouTube).
La nueva entrega se vende a US$60 la unidad, con versiones especiales para las consolas de nueva generación PlayStation 4 y Xbox One y las computadoras que funcionan con el sistema operativo Windows.
Según EB Games, su distribuidor en Australia, los aficionados se han apresurado a comprar el juego.
“Decenas de miles de aficionados han estado presentes en el lanzamiento a medianoche y temprano por la mañana de este martes en todas las tiendas de EB Games en todo el país”, indicó a la agencia AFP la directora de la marca en Australia, Debra McGrath.
ARGUMENTO
El juego se desarrolla en el 2054, cuando Atlas, una poderosa empresa paramilitar privada dirigida por el personaje de Spacey, está tratando de derrocar al gobierno. Tomado por el odio y la sed de venganza tras la muerte de su hijo, Irons se halla obsesionado por el poder, listo para llevarse por delante a todos en su camino.
Los jugadores encarnan el papel de soldados con capacidades de combate multiplicadas por diez.
Escena del videojuego Call of Duty: Advance Warfare (Foto Prensa Libre: ARCHIVO).