Raquel Zelaya, directora de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes) e integrante de Empresarios por la Educación, indicó que cualquier persona que conozca el avance que significó que los maestros fueran a la universidad tiene que deplorar la decisión de la CSJ.

“Me da la impresión de que siendo ellos abogados no consultaron con alguien que sepa de educación a nivel nacional o internacional. Si ellos confirman esa medida es un retroceso tremendo en términos de las oportunidades de elevar el nivel de educación para el estudiantado de todo el país”, explicó Zelaya.

La profesional aseguró que el amparo es un acto para consagrar la falta de oportunidades de buena calidad educativa, y que es un retroceso. Zelaya asegura que aunque hay quienes, como el partido UNE, quieren sacar un beneficio político con la medida, lo que están haciendo es cometer “un error a mediano plazo”.

“Todas las personas que hemos acompañado el proceso estamos muy desalentadas, muy desconcertadas de cómo Guatemala retrocede en los pocos avances en la profesionalización docente que se han tenido. Es una pena, y como suele suceder, eso lo van a capitalizar como un logro en la campaña electoral”, dijo Zelaya, quien sentenció que el estudio serio no es lucrativo para ciertos grupos que apoyan el retorno de la carrera magisterial.

Rechazan señalamiento

El jefe de bancada de la UNE, Orlando Blanco, dijo que como partido político creen que ambas carreras, tanto el Bachillerato en Educación como el Magisterio, pueden subsistir en el sistema público guatemalteco, y se debe abrir un diálogo al respecto.

El diputado agregó: “Ahora se abre la oportunidad para un diálogo mucho más amplio, mucho más profundo sobre la reconversión de todo el sistema del diversificado a nivel nacional. Ambas carreras son insuficientes para las necesidades educativas que se deben brindar a nivel público en todo el país”.

Blanco rechazó que promover el Magisterio sea una estrategia electoral.

“Eso no es así. Ahora resulta que cualquier propuesta se quiere deslegitimar a través de señalamientos de este tipo. En vez de hacer ese tipo de señalamientos se debe buscar una solución concreta a la problemática educativa”, manifestó el diputado.

Se gradúan

Por ahora, mil 700 estudiantes están por terminar su preparación docente en la Universidad de San Carlos. Algunos de ellos, consultados por Prensa Libre, señalan que elevar la preparación al nivel superior les permitió conocer técnicas pedagógicas que de otra manera no hubieran obtenido. Además, están convencidos de que aportarán más calidad al sistema educativo actual.

Entrevista

Bayardo Mejía  pedagogo y asesor en la dirección general de docencia, Usac

“Los modelos se desgastan”

Profesional considera que  modelo del magisterio es caduco.

La restitución del Magisterio roba la oportunidad de tener mejores maestros, mejor formados y preparados, opina el pedagogo Bayardo Mejía, quien llevó de cerca la profesionalización docente en la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac).

¿Cómo ve la resolución de la Corte Suprema de Justicia de restituir el Magisterio?
Lo considero una pena el que no podamos continuar, y el que se estén dando trabas más que fallos para poder lograr de alguna manera mejorar las condiciones educativas del país, sobre todo la formación docente. En el sistema educativo, un mal maestro no va a lograr verdaderamente darle el sentido a lo que se hace en educación.

Descuidar la atención que un maestro necesita para su formación, en cuanto al trabajo que tiene que desarrollar, es una pena, pero ni modo, tenemos que acatar lo que la ley nos indica.

¿Por qué es importante profesionalizar a los docentes?
Yo creo que conforme los tiempos transcurren los modelos se desgastan. Y entonces, obviamente, si hay avances tecnológicos en las relaciones sociales, es necesario que los modelos que educan al país vayan cambiando al compás de los tiempos y haya, sobre todo, mejoras sustantivas. No es que las escuelas normales no sean buenas, lo que pasa es que los modelos se desgastan.

El tema no es simple y sencillamente hacer cambios porque a uno se le ocurren, sino son cambios que requieren forzosamente una visión nueva de educación. Por eso pienso que es de vital importancia la profesionalización y la formación docente.

¿Cómo queda Guatemala en su sistema de educación?
Creo que quedamos dañados. Yo creo que el guatemalteco tiene que hacer muchos esfuerzos, si fuésemos del tipo de gente  que vamos a ir hacia adelante podríamos con cualquier modelo funcional, pero quitarnos esta posibilidad de dar un paso hacia adelante nos arrebata el lograr tener maestros mejor formados y mejor preparados; sobre todo una mejor formación ciudadana, la cual es vital, y eso necesita de nuevos y mejores modelos para poder atender las necesidades del país.

¿Habría otra forma de mejorar la profesionalización docente de la mano del Magisterio?
Podríamos tener acuerdos, podríamos generar muchos modelos de formación ya en el ejercicio del trabajo, pero eso requiere que nos sentemos a discutir y hacer los planteamientos  sobre qué aspectos debemos mejorar en la educación del país. El que nos quiten la formación docente a nivel universitario es una pena.

¿Se puede decir que mejoró la calidad de formación docente en estos últimos cinco años?
Yo podría decir que las cosas han ido mejorando en el tema de la formación. Todo lo que necesitamos es quizá una oportunidad para mostrar en dónde están esas mejoras en función de los esfuerzos que se han hecho.