La pandemia del coronavirus trajo retos informativos para todos los Estados. En Guatemala, la institución encargada de formular la política de comunicación del gobierno es la SCSP. Esta dependencia arrancó el año con Q40 millones, pero tuvo un aumento de Q20 millones para fortalecer las actividades informativas con relación a la covid-19.
En el contexto actual, dichos recursos deben invertirse en estrategias de comunicación que desmitifiquen las falsedades que se difunden sobre la pandemia e informar a la población sobre las medidas de salud pública, como la vacunación.
Sin embargo, la SCSP ha sido cuestionada por la falta información divulgada en los idiomas maternos de los pueblos indígenas. Ello quedó en evidencia el pasado 12 de octubre en una citación en el Congreso de la República, donde la exsecretaria de comunicación social, Patricia Letona, reconoció que no se había invertido un solo centavo en campañas informativas en idiomas mayas.
Ante esta situación, los congresistas reprocharon al gobierno, ya que por un lado estigmatiza a las personas que rechazan la vacunación contra el coronavirus, pero por otro tampoco les informa cuáles son los beneficios de inmunizarse.
La exsecretaria reaccionó aduciendo que la SCSP cuenta con menos recursos que otros años para divulgación, pero al verificar el presupuesto de la institución se establece que éste, lejos de disminuir con relación a años anteriores, ha aumentado.