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VIDEO: “Urge que Guatemala trace una ruta de inversión para los productos procesados”

Expertos señalan en La Charla, de Guatemala No Se Detiene, que el modelo basado en materias primas ya no es suficiente y que el país requiere regulación moderna, capacidad técnica e información de mercado para competir.

Guatemala cuenta con ventajas competitivas para la exportación de productos diferenciados que podrían perderse sin la inversión pública adecuada. (Foto Prensa Libre: Captura de pantalla)

El país requiere un plan de inversión pública enfocado en bienes comunes, como las carreteras, los puertos, las telecomunicaciones y la energía eléctrica, para poder enviar productos procesados al mercado internacional. Según Ramiro Pérez Zarco, exviceministro del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga), es necesario que actores clave definan la ruta para los próximos 25 años a partir de tres o cuatro objetivos y formulen un plan de nación.

Esto se dio a conocer durante el segmento La Charla, del programa Guatemala No Se Detiene, en el cual Pérez Zarco, junto a Freddy Hochstetter, presidente del Comité de Aguacate de Agexport; y Rocío Lazo, presentadora del programa, conversaron sobre los obstáculos y las oportunidades para que Guatemala exporte más productos del sector agro a mercados internacionales.

“No hemos dado ese paso hacia el valor agregado, que es más complejo, pero necesario. Esto requiere políticas públicas claras y un sector privado alineado con ellas. Esa es, probablemente, la gran tarea de los próximos diez años”, destacó Pérez Zarco.

Para seguir siendo competitivos en el mercado internacional, el sector privado ha tenido que buscar soluciones, según Pérez Zarco, quien señala que, a pesar de los esfuerzos, todavía se requiere más respaldo. Sobre esto, Hochstetter afirmó que los productores encuentran formas de producir, pero esto debe fomentarse con apoyo institucional, políticas claras y acceso a fondos.

Cómo avanzar

Actualmente, Guatemala es exportador de diferentes productos, como frutas frescas —aguacate, mango o arvejas—, a pesar de que estos no necesariamente requieren transformación, puesto que el consumo es en fresco; el reto se enfrenta con la vida útil, explicó Pérez Zarco.

“Ahí es donde entran los subproductos y la industrialización, como el guacamole, que puede tener una vida de anaquel de más de un año bajo cadena de frío”, afirmó el exviceministro, quien destacó que el valor sigue estando en la fruta fresca, pero con una monetización en mayor volumen debido a la industrialización.

Esto, según Pérez Zarco, otorga mayores opciones comerciales y permite que el productor reciba más valor por toda la producción.

Lo que se debe hacer, según Hochstetter, es seguir abriendo mercados, puesto que, explicó, mientras más salidas tenga el país, más oportunidades podrán aprovechar los productores. El presidente del Comité de Aguacate de Agexport afirmó que Estados Unidos podría ser una opción.

Para el exviceministro, la decisión sobre qué productos procesados comenzar a exportar debe partir del mercado: “Tradicionalmente, los productores hemos pensado primero en producir más y luego en dónde vender. Hoy el planteamiento debe ser al revés: qué quiere el mundo y a qué región queremos llegar, porque ese mercado define las condiciones que debemos cumplir”.

Sin contar con ese tipo de información de mercado, no es posible apostar correctamente por ninguna cadena en específico, destacó Pérez Zarco, quien mencionó que, a pesar de ello, se observa potencial en el cacao y los lácteos.

Retos

Los alimentos procesados muestran un gran potencial, entre ellos los productos agropecuarios, aseguró el exviceministro. El problema, para Pérez Zarco, es que el país mantiene una visión enfocada en exportar materias primas sin transformarlas.

Parte de la complejidad actual del mercado es el cumplimiento de regulaciones, externó Hochstetter, quien destacó que, en estos momentos, se requiere cumplir con requisitos regulatorios, límites de residuos, pesticidas y estándares de los mercados de destino.

La primera brecha que enfrenta la producción de este tipo de bienes en el país es la educación del productor, continuó Hochstetter. “El productor debe entender que, si quiere llegar a un mercado específico, debe cumplir con requisitos específicos. Si voy a producir aguacate para Europa, hay productos que puedo usar y otros que no”, explicó el presidente del Comité de Aguacate de Agexport, quien agregó que las exigencias de los supermercados y de la seguridad del consumidor han aumentado.

A partir de ello, se desarrolla un segundo problema, según Hochstetter: tarde o temprano, regulaciones similares llegarán a Guatemala, y los productores van rezagados. Para superar este obstáculo, Pérez Zarco afirmó que es necesario que el Maga apoye al productor desde la base, así como al exportador, para impulsar la competitividad internacional.

“Todo productor, por pequeño que sea, es un empresario. Son versátiles y buscan soluciones, pero necesitan acceso a financiamiento. El agro es percibido como un riesgo por la banca, y eso limita el crecimiento”, destacó Hochstetter.

Pilares fundamentales

Para avanzar en la exportación de productos transformados, Pérez Zarco afirmó que se requieren cuatro pilares clave:

Regulación: La normativa nacional debe estar armonizada con la internacional. Según Pérez Zarco, no es viable seguir operando con un Código de Salud y leyes sanitarias que fueron presentadas en los años 90.

Capacidad institucional: El sector público debe certificar y el sector privado debe entender y aplicar la regulación. Esto significa que ambos deben contar con competencia técnica.

Gestión de información: El país no cuenta con una inteligencia nacional que integre datos del campo y del mercado internacional para diseñar estrategias productivas.

Metrología y laboratorios: Lo que no se mide no se puede mejorar. Guatemala tiene una grave deficiencia en infraestructura de laboratorios. Según Pérez Zarco, muchas cadenas deben enviar muestras a Europa porque en el país no se pueden realizar ciertos análisis.

Sobre este último punto, Pérez Zarco destacó que Guatemala no cuenta con un laboratorio nacional oficial de inocuidad alimentaria, lo que implica que el servicio se terceriza, y los resultados son aceptados en algunos países, pero no en todos. “Con esos cuatro pilares fortalecidos, el país tendría más posibilidades reales de aprovechar oportunidades”, aseguró.

Según el exviceministro, Guatemala cuenta con ventajas competitivas derivadas de los tratados comerciales, pero advirtió que, sin logística adecuada, esas oportunidades se pierden.

ESCRITO POR:

Ximena Fernández

Periodista, colaboración especial para Prensa Libre.