Que la educación haya desmerecido su calidad porque las decisiones políticas no han sido las idóneas, que se haya manipulado la dignidad del maestro o las autoridades no fueron las más idóneas, o por las circunstancias del desgaste que tienen los sistemas y se vuelven obsoletas, son situaciones que demandan una evaluación formativa periódica para considerar las medidas correctivas eficientes y eficaces en el momento oportuno, para hacer una reingeniería de los sistemas. Estos y otros factores constituyen las causas de la baja calidad educativa actual, pero no se puede generalizar el menosprecio de la calidad de educadores a lo largo de la historia del país. Vale una aclaración o una disculpa a los maestros sobresalientes que dieron grandes aportes a la educación nacional, que egresaron de las gloriosas escuelas normales y normales rurales.
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