“En los últimos años, la práctica de bloquear vías de comunicación se ha convertido en una práctica normal cuando delante de situaciones que afectan la vida de las comunidades en diferentes áreas, sus demandas o exigencias no son atendidas. Tales bloqueos son también resultado de proyectos ideológicos que pretenden crear desestabilización social y política y alterar el normal desarrollo de la actividad económica del país”, señala el documento.
El texto señala que los obispos del país reconocen “el derecho que las comunidades tienen de ser atendidas por del Estado Guatemalteco cuando dichas demandas son justas”, pero señalan que definir la justicia de estas está en “relación directa con la aplicación de los valores éticos, tales como la dignidad de las personas, el acceso a los bienes necesarios para la vida digna y el bien común de la sociedad”.
Según la CEG, “La defensa y promoción de los valores éticos no se logran recurriendo a medidas de hecho, como son los bloqueos”.
Al respecto, Núñez manifestó: “Con frecuencia estas son acciones fundadas en consignas ideológicas que no están orientadas a la construcción del bien común y socavan la legitimidad del derecho de manifestación pública que se debe realizar dentro del respeto a la ley y el derecho de los ciudadanos a la libre circulación”.
El comunicado señala que “los bloqueos tienen serias consecuencias sobre la libre locomoción, el comercio y una serie de actividades legítimas de millares de guatemaltecos, que ven afectados también sus propios derechos. No es con la lesión del derecho de la libre locomoción como se defiende el derecho a ser escuchados por las autoridades respectivas”, agregó.
Por último, la CEG hace un llamado al Gobierno para atender las demandas de la población.
“Consideramos que la no atención a las demandas de la población generará más tensión y conflictividad, por lo que hacemos un llamado a las organizaciones populares a dejar de lado esta práctica, y al Estado de Guatemala y en particular a quienes dentro del mismo tienen la capacidad para atender las mismas, a ofrecer soluciones que hagan bajar dicha conflictividad y encontrar los caminos de solución de los problemas planteados por diversos sectores de la sociedad”.