Ingenio de quetzaltecos llega a Europa y desarrollan aplicación de pago

Christian  Pinzón, de 29 años, y Javier Estacuy, 28, son dos jóvenes quetzaltecos que  residen en España, donde destacan por ser los desarrolladores  de una aplicación para dispositivos inteligentes que permite a usuarios de gasolineras de ese país  y Portugal , habilitar  bombas  de combustible y efectuar el pago  sin  llegar  a la caja.

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El quetzalteco Christian Pinzón trabaja para la empresa Paymet, en Madrid, España, la cual se especializa en pagos en línea y por teléfono móvil. (Foto Prensa Libre: María José Longo)
El quetzalteco Christian Pinzón trabaja para la empresa Paymet, en Madrid, España, la cual se especializa en pagos en línea y por teléfono móvil. (Foto Prensa Libre: María José Longo)

En el  2011,  Pinzón, quien era  catedrático universitario, decidió que para crecer a escala  profesional necesitaba salir del país,  y consideró que su destino debía ser un lugar liderado por la innovación tecnológica, por lo que  se inclinó por   España.
“Al principio, como todo cambio, me resultó  difícil por  estar en una cultura diferente y tratar de abrir puertas sin conocer a nadie”, afirmó Pinzón.
 Un año después,  Estacuy, con la ayuda de  Pinzón y luego de haber ahorrado  suficiente dinero, viajó  a  España para estudiar  una especialidad en sistemas. “Soñaba con  trabajar y estudiar en el extranjero, y digo soñaba porque la realidad económica de mi familia no era la mejor como para imaginar que algún día podría salir del país”, refirió.

Impulso

En el 2014 ambos empezaron a trabajar en una empresa que  se especializa en pagos en línea y por teléfono móvil. Fue en esa compañía  donde crearon la aplicación que hoy es utilizada por miles de personas en  España  y Portugal, con el objetivo de reducir el tiempo de permanencia  en  estaciones de servicio.
 El desarrollo de la aplicación empezó a finales del 2014, y en el proyecto   se involucró a cien personas, para trabajar  en el área de desarrollo de software de la compañía, quienes fueron dirigidos   por los  quetzaltecos.  La aplicación salió al mercado en mayo del 2015.
 En el proyecto, Pinzón es el coordinador y Estacuy, jefe de desarrollo de software. Ambos  son ingenieros en Sistemas graduados en Guatemala y tienen especialidades que obtuvieron en España.
Triunfar en el extranjero no ha hecho  que los jóvenes olviden su tierra natal, pues Pinzón afirmó que echa de menos los gestos de bondad, nobleza, humildad y cordialidad que caracterizan  a los quetzaltecos.
 Estacuy indicó que extraña ir al estadio Mario Camposeco para apoyar al Xelajú MC y caminar por el barrio El Calvario,   donde creció.
Ambos desean regresar a Quetzaltenango en el futuro; Pinzón planea casarse con su prometida y formar un hogar, mientras Estacuy sueña con una Guatemala conocida  a escala  mundial por las capacidades de su gente y no por la violencia.
“Soy un joven indígena maya quiché guatemalteco, mi padre murió cuando yo tenía 11 años y vengo de un hogar de condiciones económicas difíciles, ver que todo eso ha quedado atrás, y  ayudar a mucha gente es mi mayor éxito”, afirmó.