El equipo merengue desmintió que fuera a caer algún castigo al alemán Sami Khedira y al colombiano James Rodríguez, quienes estuvieron en el festejo de Ronaldo a pesar de estar lesionados y que tenían la instrucción de irse a sus casas a descansar.
El presidente del equipo, Florentino Pérez, se presentó un día después en Valdebebas para hablar con la plantilla de jugadores.