“Elijo paradas que al final son decisivas. Como la de la final del Mundial de Sudáfrica. Ese mano a mano con Robben, no por la espectacularidad pero sí por el momento. Y luego la final de 2002 en Glasgow (de la Liga de Campeones que ganó el Real Madrid al Bayer Leverkusen), esos minutos finales”.
Casillas explicó cómo fueron los segundos previos a su acción ante Robben, en el minuto 62 de la final, cuando el marcador marchaba 0-0 entre España y los Países Bajos.
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— Liga de Campeones (@LigadeCampeones) April 8, 2020
“En ese momento lo que intenté fue previsualizar lo que podía hacer él. Había sido mi compañero en el Real Madrid y ya sabía más o menos cuáles eran sus habilidades. Intenté dejarle un poco más su lado izquierdo para que intentase regatearme por ahí, pero luego decidió tirar a portería y pude sacar el pie derecho rápidamente”, comentó.
Por último, eligió entre uno de los dos grandes títulos que ganó con la Selección de España: la Eurocopa 2008 de Suiza y Austria o el Mundial de Sudáfrica 2010.
“Es una buena pregunta. La diferencia de 2010 a 2008 es grande. Es cierto que para nosotros hay un inicio, que es la Eurocopa de Austria y Suiza donde conseguimos pasar la tanda de penaltis ante Italia (cuartos de final). De ahí, vino todo lo demás”, explicó.
“Si no hubiésemos pasado esa ronda de cuartos de final de la Eurocopa, no hubiese llegado ni el Mundial ni la siguiente Eurocopa. Fue un momento decisivo en el fútbol español. Todo lo que sea ganar un Mundial eclipsa al resto. Son diferentes momentos pero a la vez muy importantes”, apuntó.